Me llaman radical, anti-sistema
Por mi defensa de que el dinero de las contribuciones de todos se dedique a servicios públicos integrales.
Por mi absoluta negación a que el dinero público acabe en manos de empresas privadas enriqueciendo a unos pocos con conexiones en lo privado y lo público.
Por mi absoluta negación de que fundaciones y entidades como las religiosas, ONG o partidos se lleven millones y millones de euros del dinero público. Las organizaciones deben vivir gracias a sus afiliados y punto.
Por creer que la educación debe ser consensuada con los padres, completamente subvencionada por el dinero público, en esto incluyo desayuno, comida y merienda, más los libros y actividades escolares de calidad.
Por creer que la Sanidad debe ser completamente pública, debe tener un gran peso la prevención para reducir el gasto en enfermedad y debe ser accesible a toda persona sea cual sea su condición.
Por creer que las pensiones y ayudas a las personas deben cumplir con todas sus necesidades de forma que puedan tener una vida digna.
Por creer que la mejor banca es la nacionalizada, donde la sociedad tiene poder democrático sobre cómo se legisla, que inversiones se hacen y hay un férreo control sobre los depósitos de las personas, ya que son sus ahorros y nadie tiene derecho a invertirlos en el bingo de una bolsa que tiene unos riesgos cada día más temibles. Esa máxima financiera de que “el dinero siempre se ha de estar moviendo”, es asumir un riesgo anti-capitalista, porque el verdadero ahorro, el dinero en depósito no existe.
Me dicen anti-capitalista, pero realmente soy anti-deuda, creedme no se necesita endeudarse para comprar una casa o un coche, se puede hacer con una parte de ahorro y otra de letras o pagares “controlados”, por ejemplo a 5 años y con respaldo social, como en Alemania donde el estado , cuando empiezas a trabajar te crea una libreta donde el empresario está obligado a dirigir un porcentaje de tu sueldo, que se destina exclusivamente a la compra futura de un hogar, cuando alcanza cierta cantidad, puedes adquirir tu primera vivienda y el estado te recompensa incluyendo una participación en la compra.
El hogar principal no debería ser negocio.
Por saber que las inversiones que tanto bancos, como aseguradoras están haciendo con el dinero que invertimos en planes de jubilación, planes de ahorro, etc. Están tremendamente expuestas a cualquier colapso de las burbujas que se pueden dar en los productos bursátiles, el consorcio tiene menos poder de reacción que el fondo de garantía, así que el riesgo para la persona afectada es mayor.
Por creer que el único sistema contra el paro y de creación de empleo justo se basa en la revisión del ámbito local, la creación de planes de viabilidad y la facilitación de la creación de nuevas empresas que exploten los recursos autóctonos y para eso es primeramente necesario fijarse en como los lobbies y gobiernos han ido derivando las reglamentaciones actuales para favorecer a las grandes corporaciones y ahogar a los pequeños emprendedores, si realmente queremos acabar con el paro, hay que fijarse en solucionar esto.
Por creer que sin una moneda propia como tiene U.K. u otros países de Europa es imposible tener la libertad financiera necesaria para emprender el camino de la recuperación autóctona, eso quiere decir estar contra el Euro?, NO, quiere decir que el Euro puede subsistir con una moneda que nos permita gestionar lo local y su riqueza dándonos el margen necesario para tomar las medidas propias que hagan falta.
Yo no me c considero ni de derechas, ni de izquierdas, no creo en dogmas, creo en el sentido común, este me dice que la mejor forma de justicia es la auténtica democracia, la democracia donde todos no solo votamos, sino que además decidimos, porque no hay nada más útil que la inteligencia colectiva, no de grupúsculos que actúan unos contra otros, sino de la suma de todos en horizontal.
Si soy anti-este-sistema y si soy algo radical, pero sé cómo solucionar los problemas que ahora ahogan a muchos, sin tumbar a los que ya tienen una vida digna, eso sí, acabando con los chorizos auténticos culpables de esta deriva que no acabará bien, pero no desde el totalitarismo, como harían algunos, si no del reparto del poder y la responsabilidad a toda la sociedad afectada e implicada.
Es por esto que creo que si realmente queremos cambiar las cosas debemos ir hacia Procesos Constituyentes en todos los pueblos, no de “comités”, si no desde el pueblo organizado.
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