martes, 17 de noviembre de 2015

La Tormenta Financiera que se avecina no es más que un Efecto del Poder Empresarial Desatado

La tormenta financiera que se avecina no es más que un efecto del poder empresarial desatado


George Monbiot, Sin Permiso

¿Qué han aprendido los gobiernos de la crisis financiera? 


Podría escribir una columna deletreándolo. O podría hacer el mismo trabajo con una palabra: nada.

En realidad, eso es demasiado generoso. Las lecciones aprendidas son contralecciones, anticonocimiento, nuevas medidas políticas que apenas sí podrían estar mejor ideadas para garantizar que la crisis vuelva a repetirse, esta vez con impulso añadido y menos remedios. Y la crisis financiera no es más que una de las múltiples crisis – de recaudación de impuestos, gasto público y, sobre todo, ecología – que las mismas contralecciones aceleran.

Demos un paso atrás y veremos que todas estas crisis surgen de la misma causa. A quienes despliegan un poder inmenso y un alcance global se les libera de restricciones democráticas. Esto se produce a causa de una corrupción fundamental en el corazón de la política. 


En casi todos los países el interés de las élites económicas tiende a pesar más gravosamente antes los gobiernos que los del electorado. 

Bancos, grandes empresas y terratenientes ostentan un poder que no rinde cuentas, que funciona dentro de la clase política con una palmada y un guiño. La gobernación global está empezando a parecerse a una inacabable reunión del Club Bilderberg.

Tal como sostiene un ensayo del profesor de Derecho Joel Bakan en la revista jurídica de la Universidad de Cornell (EEUU), Cornell International Law Journal, dos terribles cambios han venido sucediendo simultáneamente. 


Por un lado, los gobiernos han ido eliminando leyes que restringen a bancos y grandes empresas, sosteniendo que la globalización debilita a los estados y hace imposible una legislación eficaz. Por el contrario, afirman, deberíamos confiar en que quienes ostentan el poder económico se regulan a sí mismos.

Por otro lado, los mismos gobiernos idean nuevas leyes draconianas para reforzar el poder de la élite. A las grandes empresas se les conceden derechos de personas legales. Se acrecientan sus derechos de propiedad. 


A quienes protestan contra ellos se les somete a vigilancia y control policial, de un género que resulta más apropiado para las dictaduras que para las democracias. Oh, el poder del Estado existe definitivamente…cuando se quiere.

Muchos de ustedes habrán oído hablar del Tratado de Asociación Trans-Pacífico (TPP) y de la propuesta de Acuerdo de Asociación Transatlántico de Comercio e inversión (TTIP). Se supone que son tratados de comercio, pero tienen poco que ver con el comercio y mucho que ver con el poder. 


Incrementan el poder de las grandes empresas a la vez que reducen el poder de los parlamentos y el imperio de la Ley. 

Apenas sí podrían estar mejor diseñados para exacerbar y universalizar nuestras múltiples crisis, financiera, social y medioambiental. 

Pero se avecina algo incluso peor, resultado de negociaciones llevadas a cabo, una vez más, en secreto: un Acuerdo sobre Comercio de Servicios (Trade in Services Agreement, TISA), que cubre América del Norte, la UE, Japón, Australia y muchos otros países.

Sólo a través de Wikileaks tenemos alguna idea de lo que se está planificando. 


Se podría utilizar para obligar a las naciones a aceptar nuevos productos y servicios financieros, para aprobar la privatización de servicios públicos y reducir los niveles de atención y abastecimiento. 

Parece el mayor ataque internacional a la democracia concebido en las últimas dos décadas, que ya es decir.

De modo que el Estado que se odia a sí mismo proclama que no tiene poder a la vez que destruye su propia capacidad de legislar en el plano internacional y nacional. Como si no hubiera ocurrido la última crisis financiera, y como si no fuera consciente de lo que lo provocó, George Osborne [ministro de Economía del gobierno británico], en su discurso más reciente a la City de Londres, le dijo a su auditorio de banqueros que “una exigencia central en una renegociación es que Europa detenga una regulación costosa y perjudicial”. 


David Cameron se ha jactado de gestionar “el primer gobierno de la historia moderna que al final de su legislatura dispone de menos regulación de la que tenía en un principio”.

Esto, en un mundo de una complejidad que se acelera y de floreciente delincuencia empresarial, es pura temeridad. 


Pero no temáis, dicen: el poder económico ya no necesita someterse al imperio de la ley. Puede regularse a sí mismo.

Algunos de nosotros llevamos mucho tiempo sospechando que estos son tonterías con todas las letras. 


Pero hasta ahora todo lo que teníamos eran sospechas. 

Esta semana se ha publicado el primer informe global sobre autorregulación. 

Lo encargó la Real Sociedad Británica para la Protección de las Aves, pero cubre todos los sectores, desde el de los prestamistas que liquidan el día de paga a los criadores de perros. Y demuestra que en casi todos los casos, el 82% de los 161 programas que evaluó, las medidas voluntarias han fracasado.

Así, por ejemplo, cuando la Unión Europea trató de reducir el número de peatones y ciclistas muertos por vehículos, podía haber aprobado sencillamente una ley que indicara a los fabricantes de automóviles que cambiasen la forma en que diseñan sus parachoques y capós, a un coste aproximado de 30 libras esterlinas. Por el contrario, se atuvo a un acuerdo voluntario con el sector. 


El resultado fue un nivel de protección un 75% más bajo de lo que una ley habría garantizado.

Cuando el gobierno galés introdujo una tasa de cinco peniques por cada bolsa de plástico, redujo su uso en un 80% de la noche a la mañana. 


El gobierno británico argumentó que la autorregulación por parte de los minoristas haría el trabajo de igual de bien. ¿Resultado? 

Una enorme reducción del 6%. Después de siete años perdidos, sucumbió el mes pasada a la evidencia lógica e introdujo la tasa.

Programas voluntarios destinados a impedir la publicidad de comida basura para niños en España, a reducir los gases de invernadero en Canadá, ahorrar agua en California, salvar a los albatros de los palangres en Nueva Zelanda, proteger a los pacientes de cirugía estética en el Reino Unido, parar la mercadotecnia agresiva de medicamentos psiquiátricos en Suecia: todos, todos, todos, todos han fracasado. 


Lo que el Estado podía haber hecho de un plumazo de modo barato y eficaz se deja en cambio a los balbucientes esfuerzos de sectores que, aun siendo sinceros, se van fatalmente minados por gorrones y oportunistas.

En varios casos las empresas pidieron nuevas leyes que con normas más rigurosas para todo el sector. 


Por ejemplo, quienes elaboran envoItorios plásticos para el forraje de explotaciones agrícolas trataron de conseguir que el gobierno británico incrementara el nivel de reciclaje, mientras que las empresas de jardinería querían una regulación que eliminara gradualmente la turba. 

Los gobiernos se negaron. ¿Fue esto resultado de ciega ideología o de sórdido interés propio? Los mayores donantes a los partidos políticos tienden a ser los peores operadores, recurriendo a su dinero para que sigan siendo legales sus malas prácticas (pensemos en Enron).

Puesto que los partidos que financian se pliegan a sus deseos, todos los demás se ven forzados a adoptar sus reducidos baremos. Sospecho que los gobiernos saben tan bien como cualquiera que la Ley es más eficiente y eficaz que la autorregulación, y esa es la razón por la que no se utiliza.

Contener al electorado, liberar a los poderosos: se trata de una fórmula perfectamente diseñada para una crisis multidimensional . 


Y chico, estamos cosechando lo sembrado.


Above is the content the blog provided. If incomplete, read the original here.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Si nos han de robar, 
que sean otros y no los mismos de siempre

Si como votantes, no nos escuchan
como consumidores, lo harán
boicoetemos sus empresas.
Llevamos las de ganar. 

Como acabar con la ESTAFA de las ELÉCTRICAS... de una puta vez pasando de los Vendepatrias del Bipartidismo

Ante el robo continuo y escandaloso por parte de las eléctricas y sus abusos en el recibo de la luz
propongo... 
actuar todos unidos como consumidores
contratando TODOS 
o en su defecto una gran mayoría,
  otra compañia eléctrica que no sea ninguna de estas dos (ENDESA - IBERDROLA) y cambiarnos a otra cualquiera de las muchas ofertas que existen hoy en día.

De tal forma que no les quede otra a las grandes que plegarse a nuestras demandas de una tarifa más justa y mucho más barata
o atenerse a las consecuencias 
de seguir con su estafa.

En nuestra mano está que siga este robo o cortar por lo sano para que no nos sigan mangoneando

ARMAK de ODELOT

Canción del Indignado Global

(solo pá Mentes preclaras 

libres de Polvo y Cargas)

Si me han de matar que sea,
 un Trump que de frente va

  no un Obama traicionero, 

que me venga por detrás.


Éstos del bipartidismo, 

a nadie ya se la dan

Tanto monta, monta tanto,

ser sociata o liberal.


Que harto me tienen sus cuentos, 

de crisis y guerras sin más

Cuando no hay bandera que tape, 

la ansia de un criminal.


Daños colaterales son, 

inocentes masacrar

si lo hiciéramos con ellos, 

no habría ni una guerra más.


Por eso pasa que pasa, 

que nadie se alista ya

a no ser que la CIA pague,
 
como al ISIS del MOSAD


A mí, que nunca me busquen, 

ni me llamen pá luchar.

Que yo no mato por nadie. 

Yo mato por no matar.


La paz de los cementerios 

es la paz del capital

Si soy rojo es porque quiero, 

en vida, vivir en paz.


Hoy tan solo mata el hambre, 

del rico por tener más 

Con el cómplice silencio, 

de toítos los demás.


Que preferimos taparnos, 

los ojos pá no pensar

O mirar pá otro lado, 

pensando que el mal se irá.


Creer que lo que a otro pasa, 

no nos tiene que importar.

Cá palo aguante su vela, 

repetimos sin cesar.


Éste es el mantra egoísta 

que rula por la sociedad

como si lo que le pase a otro, 

no te pueda a tí pasar


Más todo, cuán boomerang vuelve, 

al sitio de donde partió

y tal vez ocupes mañana, 

el sitio que otro dejó.


Mil pobres ceban a un rico, 

otros mil le dan jornal,

y otros cuantos dan su vida 

porque todo siga igual. 


Que no me coman la oreja, 

que no me creo ya ná

de sus guerras, sus estafas, 

ni su calentamiento global


Tan solo vuestras mentiras, 

esconden una verdad

que unos pocos están arriba 

y abajo tós los demás.


Da igual que seas ateo, 

cristiano o musulmán.

Solo los elegidos, 

el paraíso verán.


Hay medios alternativos, 

amarillos muchos más.

Unos más rojos que otros. 

Los menos, de radikal.


Más todos tienen su cosa, 

y a todos hay que hojear

Que comparando se tiene 

opinión más general.


Qué de tó aprende uno. 

Nadie tiene la verdad.

Ser más papista que el Papa, 

no es garantía de ná.


Solo creo en lo que veo, 

díjome santo Tomás, 

que el que a ciegas se conduce, 

no para de tropezar.


Y al enemigo, ni agua, 

ni nunca contemporizar

No dudes, tarde o temprano, 

siempre te la jugará.


No hay que seguir a nadie 

y a todos hay que escuchar.

Si tu conciencia te guía, 

de nada te arrepentirás.


Dá gusto ver a los ricos, 

pegarse por serlo más

mientras en eso se hallen, 

quizás nos dejen en paz.


Si te crees o no sus mentiras, 

a ellos les dá igual.

Con tomarlas por veraces, 

les basta para actuar. 


Que no me cuenten más cuentos, 

que tós me los sé yo ya.

Se demoniza a cualquiera

que no se deje robar.



No basta con ser un santo, 

sino ser de"su santoral"

Como la cojan contigo, 

no te valdrá ni el rezar.


Pensamiento único llaman. 

Anteojeras pá no pensar

más que en la zanahoria. 

El palo irá por detrás.


Si no crees en lo dictado, 

anti-sistema serás

Y por mucho bien que hagas, 

te van a demonizar.


Que no me coman la oreja, 

que a mí, no me la dan.

Que me sé todos sus cuentos 

y también, cada final.


Si de cañon, quieren carne, 

pál matadero llevar

que busquen a otro tonto, 

que este tonto no va más



No se ha visto en tóa la historia, 

otra estafa sin igual.

Que la madre tóas las crisis, 

que creó el capital


Y cuando tan ricamente, 

uno estaba en su sofá

Relajado y a cubierto, 

de inclemencias y demás,


te cortan sin previo aviso

el grifo de tu maná. 


Y te dejan sin tus sueños,
 
sin trabajo y sin hogar


y pá colmo y regodeo 

de propios y extraños, van

y te dicen como aviso

que al rojo no hay que escuchar


que son peores que el lobo,

del cuento y mucho más

y que si vas y los votas

toíto te lo robarán.



Si como votantes, no nos escuchan

como consumidores lo harán.

Boicoetemos sus empresas

Llevamos las de ganar. 


Si no queda más remedio

que dejarnos de robar

que sea otro y no el de siempre

tal vez así, aprenderá


No hay pan pá tanto chorizo,

dicen, cuando lo que sobra es pan.

Lo que no hay es un par de huevos
 
pá que no nos choriceen más.


Resultado de imagen de eladio fernandez refugiados suecia

Ellos tienen de tó

los demás, cuasi-de-ná

mas ellos son cuatro mierdas

y nosotros sémos más.


La próxima revolución 

contra las corporaciones será

y si ésta no se gana 

no habrá ninguna ya más.

Quien sepa entender que entienda

lo que digo es pá mascar

despacio y con buena conciencia.

Mi tiempo no dá... pá más


Armak de Odelot


Dicen: 

No será televisada, 

la próxima revolución.

Más como nadie se fía 

de lo que se nos dice hoy en día,

pasamos los días enteros, 

tumbados en el sofá

delante la caja tonta,

 por no perder el momento
del pase de la procesión 
que tós llevamos por dentro