Jared Kushner, el “yernísimo”, pertenece a una secta judía mesiánica y de los Rothschild
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- abril 12º, 2017
Este artículo describe los directos vínculos que el yerno de Trump, Jared Kushner, tiene con una secta hasídica judía, a la que también está adherida la familia Rothschild.
Su objetivo es hacer cumplir las profecías judías en torno a su mesías y el Armagedón.
A partir de aquí, se entiende todo lo que ha sucedido en las últimas semanas en la Casa Blanca: estos son los que mandan.
Enfrentamiento directo -por fin- entre los caballeros blancos y los sionistas.
Jared Kushner pertenece a Rothschild Doomsday Cult
De Trump hijo-en-ley y asesor principal Jared Kushner pertenece a una secta apocalíptica élite que cuenta con los Rothschild como miembros y está tratando de fomentar una “profetizado”tercera guerra mundial .
La Jabad Lubavitch es un culto de la supremacía judía que sirven a los Illuminati. A pesar de sólo tener 200.000 seguidores de élite, que tiene lazos íntimos con casi todos poderosa líder del gobierno en la tierra.
El culto cree que los Judios son el pueblo escogido de Dios y todos los demás es basura. En el libro Reuniones de Conversaciones Rebe Schneerson dice a sus seguidores que los judíos son una extensión de Dios y los gentiles están destinados a servir a los Judios.
Los Rothschild pertenecen a este culto. El historiador Wolfgang Eggert dice Jabad Lubavitch es la verdadera cara de los Illuminati. Dice este culto tiene la intención de iniciar un holocausto nuclear con el fin de cumplir la profecía bíblica y acelerar el retorno del Mesías:
“ La historia y la política son una gran película, y ellos son los directores, con lo que la vieja testamento-profecía en realidad. Capturaron masonería mediante la creación de los Illuminati (a través de Rothschild / Jacob Frank / Weishaupt); hicieron un pacto con la monarquía británica cuando se financian Guillermo III para convertirse en rey; colocaron los Reales británicos a la cabeza de los francmasones; hicieron que el sistema bancario moderno y la Reserva Federal (a través de Rothschild); hicieron el sionismo, las guerras mundiales, la Unión Europea y así sucesivamente. Reinan a través de sus marionetas Rothschild ( cuyos antepasados habían sido parte de la secta jasídica ) y Rockefeller, que eran la fuerza motriz detrás de Bilderberg, los trilaterales, etc. Ahora estamos en el “fin de los tiempos”; que están tratando de fomentar una “profetizado” Tercera Guerra Mundial “.
Chris Bjerkness está de acuerdo : La redención requiere el “Rey de los Judios” (los Rothschild) para gobernar el mundo después de un holocausto nuclear.
Jared Kushner asistió al Jabad en Harvard. “ Israel no era una discusión política para él; que era su familia, su vida, su gente ,”dijo Hirschy Zarchi, rabino en la Casa Jabad en Harvard.
Henry Makow informa : Entre 2003 y 2013, fundación de la familia de Kushner donó un total de $ 342.500 a diversas instituciones y proyectos relacionados con el movimiento.
Especialmente dotado era el centro de Jabad en la Universidad de Harvard, que recibió $ 150.000 en 2007 (única donación más grande de la fundación de una empresa afiliada a Lubavitch) y luego otros $ 3.600 en 2013. Además, la Fundación Donald J. Trump ha donado $ 11.550 a tres instituciones de Jabad.
En 2006, el padre de Charles Kushner fue condenado a 24 meses de prisión por hacer donaciones de campaña ilegales y manipulación de testigos.
El poder de Jabad deriva de dos servicios que prestan los Illuminati:
1. Trabajan con la inteligencia israelí en operaciones criminales y de inteligencia.
2. Ellos promueven una ideología supremacista que fomenta a los sionistas a hacer actos sucios.
Jared Kushner is a globalist/satanist who is trying to undermine President Trump on behalf of the Deep State. He needs to go.#FireKushner
Jabad es una secta HERÉTICA
Fundada en Rusia del siglo 18, Jabad es una rama del judaísmo jasídico, una forma de judaísmo ortodoxo que promueve la mística judía como el camino hacia la iluminación.
Lubavitchers chabad estudian la Cábala, el credo satánico que borra los absolutos morales y cree que Dios es 'subjetivo'.
La Jabad se dio a conocer bajo la dirección de 'El Gran Rebe Menachem Mendel Schneerson. Sus políticas condujeron Jabad a través de un período de grandes instituciones de expansión se establece en 900 ciudades de todo el mundo.
'El Gran Rebe dio conversaciones regulares sobre la venida del Mesías. Con el tiempo, Lubavitchers comenzó a darse cuenta de que se refería a sí mismo.
La creencia de que Schneerson era el Mesías fue primero abiertamente profesado por el rabino Shavom Dol Wolpo en un libro de 1984 y rápidamente ganó aceptación.
Absurdo, aunque murió en 1994 'La Gran Rebe' sigue siendo el líder oficial de Jabad, como 'Gran Líder' Kim Il-Sung es el líder de Corea del Norte.
En las escuelitas de Jabad los niños cantan y saludan al Rebe invisible.
Supremacistas RACISTAS
El Jabad cree los Judios son el pueblo escogido de Dios y todos los demás son basura. En el libro “Conversaciones Reuniones y” la Gran Rebe dice a sus seguidores que los judíos son una extensión de Dios y los gentiles están destinados a servir a los Judios.
“ Existen dos tipos contrarios de alma, un alma no judía proviene de tres esferas satánicas, mientras que el alma judía proviene de la santidad. “
“ Un Judio no fue creado como un medio para algunos [otra] propósito; él mismo es el objetivo, ya que la sustancia de todas las emanaciones [divina] fue creado sólo para servir a los Judios “.
Rabbi Ginsburgh, un destacado rabino de Jabad, ha argumentado que debido a que los gentiles son genéticamente inferiores a los Judios, un Judio debe ser capaz de tomar órganos gentiles si necesita uno.
Él fue grabado diciendo: " En cuanto a los goyim ... La actitud de Zalman (era):“almas gentiles son de un orden completamente diferente e inferior. Son totalmente mal, sin ninguna cualidad en absoluto. “
' Si cada célula en un cuerpo judía implica divinidad, es una parte de Dios, entonces cada cadena de ADN es una parte de Dios. Por lo tanto, algo que es especial acerca de ADN judía '.
'Si un Judio necesita un hígado, se puede tomar el hígado de un inocente no-Judio pasando por salvarlo? La Torá probablemente lo permitiría. La vida judía tiene un valor infinito '.
El Jewish Daily Forward informó de una charla dada por el rabino de Jabad Mani Friedman.
Al preguntarle cómo piensa que los Judios deben tratar a sus vecinos árabes Friedman respondió: " La única manera de combatir una guerra moral es la manera judía: destruir sus lugares sagrados. Matar a los hombres, las mujeres y los niños (y ganado) '.
La historia de los Kushner
el (otro) apellido más poderoso de Nueva York
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- octubre 7º, 2015
Puede que el apellido Kushner no le diga nada. Y que solo le suene por ser el del marido de Ivanka Trump —Jared Kushner— y el del novio de la top model Karlie Kloss —Joshua Kushner—.
Pero en realidad Jared y Joshua pertenecen a una de las familias judías más ricas y poderosas de Nueva York.
Sus abuelos, Joseph y Rae llegaron a Estados Unidos en 1949 tras sobrevivir al Holocausto. Como buen emprendedor, Joseph empezó de la nada y terminó creando un imperio inmobiliario con más de 4.000 pisos en New Jersey, donde residían.
Su segundo hijo (y padre de los chicos), Charles, heredó el olfato por los negocios de su progenitor y creó la constructora Kushner Companies. Cuando empezó, solo tenía una empleada, su secretaria. Ahora son más de 800.
Además de estar a la cabeza de Kushner Companies, Jared, de 34 años, compró en 2005 el periódico The New York Observer, después de que su padre se viera envuelto en un escándalo de fraude y terminara en la cárcel.
Cuando en 2009 se casó con la hija del magnate Donald Trump (Ivanka se convirtió al judaísmo para casarse con él por el rito judío) se unían dos de las familias más poderosas de ciudad. La pareja tiene dos hijos,Arabella y Joseph.
Por su parte Joshua, de 30 años, se graduó en Harvard y trabajó en Goldman Sachs. Además de inversor en Instagram, es uno de los socios fundadores de Oscar Insurance, una moderna compañía de seguros médicos.
Cuando en 2009 se casó con la hija del magnate Donald Trump (Ivanka se convirtió al judaísmo para casarse con él por el rito judío) se unían dos de las familias más poderosas de ciudad
Junto a su novia Karlie forman una de las parejas más guapas y glamurosas de Nueva York. Nicole y Dara, las chicas de la familia, no trabajan en el imperio familiar.
Nicole es directora creativa en Ralph Lauren, y Dara, la primogénita, cuida de sus hijos en casa.
Sexo, Mentiras y Cintas de Vídeo: el lado oscuro de Kushner
En 2005 Charles Kushner fue condenado a dos años de prisión por evasión fiscal, hacer donaciones ilegales en campañas políticas y presionar a un testigo.
Se trataba de su cuñado, el marido de su hermana Esther, a quien Kushner grabó manteniendo relaciones sexuales con una prostituta de lujo que él mismo había financiado.
“La comida de la cárcel es como la de los perros. Me alimentaba básicamente de cacahuetes y sardinas”, contó Kushner tras su salida.
Jared Kushner e Ivanka Trump siguen atentos un discurso de Donald |
Jared Kushner, el jefe de la corte que rodea a Donald Trump
El marido de Ivanka ha manejado la campaña de Donald en la sombra. El presidente va a dejar sus negocios en manos de sus hijos.
En abril de 2007, una nueva pareja llegó al mundo del corazón de Estados Unidos: J-Vanka (pronunciado 'yéi-vanka').
Era la era de Brangelina, deBennifer (Ben Affleck y Jennifer López) y de Tomkat (Tom Cruise y Katie Holmes).
Así que J-Vanka no desentonaba. Como tampoco los personajes que estaban bajo su nombre: Jared Kushner (35) e Ivanka Trump (35).
Eran los hijos de Charles Kushner (62) y Donald Trump (70), dos empresarios inmobiliarios famosos, controvertidos y extremadamente bien conectados con el Partido Demócrata.
Jared e Ivanka tenían ciertas cosas en común. Eran ambiciosos y habían crecido rodeados de lujo.
Una de las primeras veces en las que aparecieron juntos fue en la fiesta que Jared dio para celebrar el rediseño de su penúltimo juguete, el semanario New York Observer.
Fue en el hotel Four Seasons, uno de los más caros de Manhattan y, según la revista New York: "Había caviar literalmente encima de todo".
Las similitudes iban más allá de sus orígenes.
Jared e Ivanka eran considerados los listos de sus respectivas familias, con la excepción, claro está, de los padres, aunque acerca de éstos no había consenso sobre si eran más sinvergüenzas que listos.
Y también había divergencias.
Una, la más profunda, de carácter religioso. Los Kushner son judíos ortodoxos. Tan ortodoxos que no sólo no comen cerdo ni marisco, sino que ni siquiera encienden la luz los sábados, porque eso hace que alguien tenga que trabajar en el shabat.
Los análisis de los datos de Twitter ponen de manifiesto que, durante la campaña, Donald Trump colgaba más mensajes en esa red social desde su teléfono personal los sábados, presumiblemente porque Jared e Ivanka no trabajaban y, por tanto, no podían controlar las erupciones de furia del entonces candidato.
Así llegó J-Vanka.
Una relación que se hizo pública el 27 de abril de 2007de la manera menos romántica y más inmobiliaria: con una nota de prensa anunciando la fiesta para celebrar la inauguración del edificio de apartamentos de lujo Gramercy Stark, en Manhattan, y en la que en la lista de invitados aparecían "Jared Kushner y su novia Ivanka Trump".
En 2008, la pareja rompió cuando Jared, a instancias de su madre, se escudó en que Ivanka era goyim, o sea, no judía. Ivanka aceptó convertirse por amor.
Dejó toda la comida que no es kosher y se sometió a los ritos para entrar a formar parte del judaísmo.
Nueve años y tres hijos después, J-Vanka no sólo ha superado en longevidad a Tomkat, Bennifer, y Brangelina, sino que se ha convertido, de facto, en la primera familia de Estados Unidos. Jared e Ivanka son la verdadera power couple, la pareja de poderosos, de EEUU.
Bill y Hillary van a tener que hacerse a un lado.
Los sucesores han llegado. La saga Trump está en marcha. No son los Kennedy, desde luego. Pero el futuro es suyo. O, más bien, de Jared.
Cuando su suegro jure el cargo él tendrá una influencia ilimitada en la Casa Blanca. Kushner ha demostrado una habilidad política tan extraordinaria como despiadada.
Si Trump tiene algún día un sucesor, éste va a ser Jared. La decisión de Trump de dejar la gestión de sus empresas a sus hijos para evitar conflictos de intereses juega a favor de su yerno.
Con ese movimiento, el presidente mantendrá el contacto con los gestores de sus 500 empresas y, al mismo tiempo, tendrá el control de las agencias regulatorias que les dan subvenciones y supervisan sus actividades; y línea directa con los gobiernos y empresas de los 21 países en los que tiene inversiones.
Ahí es donde Jared va a ver su poder reforzado.
Ahí es donde Jared va a ver su poder reforzado.
Él es la única persona que se salva en el círculo inmediato de Trump. Así lo ha declarado el ex consejero delegado de Google, Eric Schmidt, que apoyó a Hillary Clinton: "Jared Kushner es la mayor sorpresa de las elecciones de 2016.
Por lo que sé, él fue quien dirigió la campaña, y la dirigió sin recursos de ningún tipo".
La campaña de Trump, efectivamente, se dirigió con poquísimos recursos.
Así que Kushner puede ser un genio de la organización y un trabajador incansable. Pero el equipo de Trump no sólo exhibió falta de recursos sino, también, de escrúpulos.
Venganza personal
Cuando en 2007 Kushner conoció a Donald Trump, éste le dijo: "Espero que vayas en serio". Al menos, ésa es la versión oficial. Pero Kushner sí iba en serio. Su historia con su padre, con su suegro y con el político que más apoyó a Trump en su carrera a la Casa Blanca, el gobernador de New Jersey, Chris Christie, es una intersección de tragedia de Shakespeare y de Los Soprano.
Lo que Jared Kushner ha hecho con Chris Christie es propio de una película. La historia arranca en 2004.
Ese año, Christie se lanzó contra Charles Kushner, el padre de Jared, uno de los mayores promotores inmobiliarios del estado de New Jersey, por evasión fiscal, donaciones políticas ilegales -todas al Partido Demócrata- , y fraude documental.
Una de las piezas claves en la investigación era su cuñado, William Schulder.
Cuando Kushner padre lo descubrió, contrató a dos prostitutas por 25.000 dólares para que sedujeran a Schulder y tuvieran relaciones sexuales con él. Kushner grabó el encuentro sexual y envió el vídeo a su hermana Esther.
La venganza sólo sirvió para que Christie añadiera un cargo más a la lista contra Kushner: chantaje a un testigo. En 2005, el consuegro de Donald Trump fue condenado a dos años de cárcel.
En 2010, Chris Christie se presentó como candidato republicano a gobernador de New Jersey. Ganó.
Se convirtió en el estandarte de los republicanos de centro. Su siguiente paso era la presidencia. Pero ahí se cruzó Trump.
El 7 de febrero pasado, Christie abandonaba la carrera por la Casa Blanca. Y el 27 se convertía en el primer candidato republicano que apoyaba de manera explícita e inequívoca al apestado del partido, Donald Trump.
Su objetivo era claro: la vicepresidencia. Su error, también fue evidente: no pensar que Jared Kushner no había olvidado que él puso a su padre entre rejas.
Christie no sólo no logró la vicepresidencia, sino que ha sido apartado del equipo de Donald Trump.
Su futuro en New Jersey, acosado por un gigantesco escándalo, es negro. De hecho, Christie corre el peligro de seguir los pasos de Charles Kushner de acabar en la cárcel.
Kushner sabe bien la importancia de tener buenas relaciones.
Según explica en su libro The Prize of Admission (El Precio de Admisión) el Premio Pulitzer Daniel Golden, entró en Harvard después de que su padre donara a esa Universidad 2,65 millones de euros, en una operación de soborno encubierto que es común en Estados Unidos.
Así que sabe que el acceso a Donald Trump es fundamental.
Pero, al contrario que su suegro, Kushner no necesita publicidad.
No habla con la prensa.
Y, mientras todos están obsesionados con lo que pasa en la Torre Trump de la Quinta Avenida, donde reside el futuro presidente, Kushner dirige la transición -incluyendo la vendetta contra Christie- a pocos bloques de distancia, desde un edificio que él compró por 1.700 millones de euros en 2007, justo en el momento más alto de la burbuja inmobiliaria y que estuvo a punto de llevarla a la quiebra y de aniquilar la fortuna familiar en varias ocasiones.
Y, mientras todos están obsesionados con lo que pasa en la Torre Trump de la Quinta Avenida, donde reside el futuro presidente, Kushner dirige la transición -incluyendo la vendetta contra Christie- a pocos bloques de distancia, desde un edificio que él compró por 1.700 millones de euros en 2007, justo en el momento más alto de la burbuja inmobiliaria y que estuvo a punto de llevarla a la quiebra y de aniquilar la fortuna familiar en varias ocasiones.
Kushner sobrevivió a esa crisis. Y se ha convertido en el último Trump. Por ahora, en el consejero áulico del presidente. Acaso, algún día, en su heredero.
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