domingo, 17 de julio de 2016

El Capitalismo Neoliberal ha convertido a los Estados en Mendigos de la Banca y Lacayos de las Corporaciones

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Capitalismo: problema mundial

Colectivo la Trocha
Colombia
Las ventajas comparativas están provocando una crisis en la producción a nivel mundial. Los países del mundo, a consecuencia del llamado libre mercado, se especializan en la exportación de  determinados productos, mientras otros productos son importados.
A Latinoamérica y África en particular, les toco el papel de ser exportadores de alimentos, materias primas: petróleo, gas, minerales, aceites. Mientras que a Europa, Sudeste asiático y Norteamérica les correspondió el papel de procesar materias primas y convertirlas en maquinaria pesada, electrodomésticos, autos, aviones y muchas cosas que se producen como consecuencia del conocimiento y la investigación científica.
Esta crisis de la producción ha generado un incremento de los precios de los productos y una carencia de empleo para las personas. La especialización de la producción se contrapone al empleo, porque son pocos los que se contratan para las tareas productivas y en lugares específicos del país, por eso la gente ha tenido que salir a rebuscar el dinero diario. 
La economía del rebusque ha convertido a los países en mendigos. Muchos no saben si mañana se levantaran y conseguirán para la comida del día. La economía de mercado es una carrera por la supervivencia.
A consecuencia de la crisis de la producción, los países imperialistas quieren llevar al mundo a la guerra y detrás de ellos las corporaciones económicas para recomponer la economía capitalista y mantenerla hegemonía que los Estados Unidos han tenido desde la desintegración y la traición a la Unión Soviética[1].
El capitalismo utiliza el Estado para su propio beneficio, pero los propagandistas del neoliberalismo-Milton Friedman, Christine Lagarde, Thomas Sowell- han generado la ilusión entre los débiles –como dice Theotonio Dos Santos- que la solución a los problemas es la completa ausencia de Estado en términos económicos; que la economía libre puede regular la vida social. Mientras esta propaganda es regada en los pueblos, las corporaciones ocupan lugares estratégicos en los Estados, para seguir aumentando el caudal de riqueza de que disponen.
El libre mercado solo sirve para darle poder a las corporaciones y que estas ocupen el lugar del Estado. Las corporaciones han inaugurado fundaciones que se encargan de gestionar educación, bibliotecas, centros culturales, asesorías comerciales y jurídicas, gestión de proyectos y otras cosas que le corresponde al Estado.
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El ejemplo claro es la biblioteca que inauguro la familia Santodomingo en Bogotá. El Estado ha acelerado el enriquecimiento de los burgueses nacionales e internacionales, mientras desbarata con la fuerza a los trabajadores y campesinos, así como a las familias de estos.
El principal propósito de Estados Unidos, Inglaterra, Francia, China es asegurarse los mercados de los países, pero también asegurar la obtención de materias primas al más bajo costo, incluso gratuitamente, como estaba sucediendo en Turquía con el Estado Islámico y que ha sido lentamente desmontando por la intervención Rusa.
Estados Unidos principalmente se esfuerza por contener a China para hacerse con el mercado interno de los países y los recursos vitales, “el despliegue de Washington hacia los países productores de petróleo del Mar Caspio, [la] invasión de Irak, son parte del plan para extraer riqueza que pueda ser transferida de vuelta a los EE.UU. para financiar sus déficits”.[2]
Igual sucede en África, países como Francia y Bélgica han ocupado militarmente varias regiones con el objetivo de garantizar la producción de minerales que son enviados a las fábricas de estos países.
Mientras que China ha asegurado espacios de comercio a nivel internacional, haciendo convenios con los países y aprovechando las ventajas que ha generado la superproducción de mercancías en su país. 
Sin embargo, la disputa entre China y Estados Unidos no es política, sino económica, ya que los burgueses de China, aquellos millonarios, han desplazado a los burgueses de Estados Unidos y Europa, y han provocado la ruina de algunas empresas importantes.
La clase obrera de los distintos países se ha lanzado a las calles para denunciar al Estado porque sirve a los intereses de los burgueses (los dueños y propietarios de las corporaciones económicas y financieras). Como consecuencia de la crisis, en España se ha desalojado a cientos de familias que no han podido pagar los costos de los créditos bancarios. Esto lo hacen con el objetivo de salvar a la Banca privada de los desajustes financieros.
Las casas vacías se subastan entre los que puedan comprarla, así se soluciona el problema financiero del Banco, mientras las familias desalojadas se van a pagar arriendo, vivir por decenas en pequeñas casas o sufrir los vejámenes de la vida callejera. 
Así mismo, los programas de austeridad van destinados a recortar los gastos sociales para destinar el dinero a salvar la industria y la banca.
Es evidente que el Estado no sirve a todos sino a pocos[3]. Por otro lado, las movilizaciones populares en Francia rechazan la reforma laboral que continua con el ciclo de poner sobre la espalda de los trabajadores los costos de la crisis capitalista.
La burguesía de la Unión Europea y Estados Unidos han recurrido a su vieja táctica para dividir el movimiento obrero y campesino: la utilización del fascismo, el racismo y la xenofobia.
Así muchos sectores confundidos por la situación social derivada de la crisis han comenzado a mirar con ilusión vaga al fascismo como la solución de los problemas, achacando la crisis a los inmigrantes ilegales y legales que pululan por esos países. Incluso hablando de la perdida de la identidad europea y la invasión “musulmana” del continente.
El discurso del fascismo siempre ha servido como herramienta para detener el descontento popular, ya lo utilizaron en los años 30 del siglo pasado, durante los años de la Gran Depresión económica. 
Sin embargo, el discurso fascista da aliento a la burguesía para realizar una serie de ajuste que permitan la revitalización de la economía, entre ellos la subcontratación y explotación de los inmigrantes, pagando bajos salarios y colocándolos a trabajar más horas de las reglamentadas.
Según Thierry Meyssan, la emigración del Norte de África y Medio Oriente fue promovido por las empresas europeas, especialmente alemanas, para atraer mano de obra barata y permitir la revitalización de la producción.
Igualmente aquel discurso fascista ha calado en una gran cantidad de personas de Europa central y Norteamérica, así como de América Latina. La idea de ellos es que existe un complot internacional judío masónico para acabar con el mundo, de esta manera le hacen el juego al sistema que quiere desviar las miradas de la causa real del problema: la economía capitalista.
Los fascistas son una espina en el zapato del movimiento revolucionario, juegan a dos bandos, muchos de ellos han salido a las calles para apoyar la represión de las fuerzas de seguridad, así ha sucedido en las movilizaciones en París contra la reforma laboral y en la marcha del primero de mayo en Berlín. 
El discurso fascista ha logrado ganar adeptos en los países del Este, donde la crisis económica produce cientos de suicidios diarios. Muchas personas recuerdan con  nostalgia el socialismo; muchas comunidades obreras, estudiantiles, campesinas han comenzado a organizarse nuevamente con la perspectiva de la lucha contra el capitalismo.
El fascismo gano terreno en Ucrania con el movimiento de Maidan pero viene en picada porque no ha solucionado las necesidades de las personas. Todos los días pierde la fuerza impetuosa que tuvo inicialmente. En Estados Unidos el racismo ha provocado el despertar de los afrodescendientes que ven como sus derechos son pisoteados cada vez que el Estado lo desea. Así muchas han integrado comunidades de resistencia contra al racismo.
Mientras en Medio Oriente y África la lucha de los países por el control económico es militar, en América Latina, los Estados Unidos, Colombia, México, Chile, Perú y la clase burguesa de todos los países han recurrido a la táctica de guerra económica y psicológica para luchar contra la clase trabajadora y el movimiento revolucionario.
Sin embargo, la correlación de fuerzas en Latinoamérica es desequilibrada. Mientras los partidos de la burguesía tienen empresas, medios de comunicación, poder electoral y militar, la clase trabajadora y campesina no tienen los medios necesarios. 
En Brasil se ha demostrado que el 95% de los medios de comunicación pertenecen a empresas privadas y todos estos medios, diariamente, criminalizaban la gestión de DilmaRousseff. Igualmente sucede en Colombia y Perú, los medios de comunicación están en manos privadas y estos engañan al pueblo, o solo trasmiten lo que les conviene.
Todos los medios de comunicación corporativos se han unido para mentir, disociar, engañar y manipular a la población con relación a Venezuela, haciendo creer que el socialismo no puede ser puesto en marcha en ningún país y que solo el capitalismo es viable. 
De esta manera, mucha gente cree que el socialismo es un sistema corrupto e inviable, y prefieren vivir en la miseria diaria, ‘rebuscándose la papa’. Incluso en la clase obrera hay sectores profundamente engañados que defienden a los oligarcas de Venezuela y a aquellos que han sido encarcelados por generar violencia, como el señor Leopoldo López.
En Venezuela los burgueses emprendieron una guerra económica en la que escoden los alimentos y productos para que la gente crea que hay escasez, luego los sacan para venderlo a altos costos. Igualmente la campaña de contrabando desde Colombia provoca millones en pérdidas. 
Los contrabandistas, con la ayuda de sectores de la Policía Nacional permiten el contrabando y esconden a los contrabandistas en barrios populares de las ciudades fronterizas. 
La gente del barrio no denuncia para evitar problemas.La crisis de la producción sigue acrecentando la brecha de miseria material entre burgueses y trabajadores[4]. Son los trabajadores los principales afectados por la crisis económica capitalista.
[1] La Unión Soviética fue traicionada por la dirección del PCUS de los años 80.
[2] Petras, James. ¿Quién gobierna el mundo?
[3] Un informe de la Universidad de Princeton demuestra que Estados Unidos en un Estado plutocrático que sirve a los intereses de las corporaciones y no al pueblo, como dijera alguna vez Lincoln
[4] Dejar claro que todos lo que trabajen en una rama de la economía comercial, industrial o financiera son trabajadores, incluyendo a los que viven del rebusque diario y los artesanos.

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Si nos han de robar, 
que sean otros y no los mismos de siempre

Si como votantes, no nos escuchan
como consumidores, lo harán
boicoetemos sus empresas.
Llevamos las de ganar. 

Como acabar con la ESTAFA de las ELÉCTRICAS... de una puta vez pasando de los Vendepatrias del Bipartidismo

Ante el robo continuo y escandaloso por parte de las eléctricas y sus abusos en el recibo de la luz
propongo... 
actuar todos unidos como consumidores
contratando TODOS 
o en su defecto una gran mayoría,
  otra compañia eléctrica que no sea ninguna de estas dos (ENDESA - IBERDROLA) y cambiarnos a otra cualquiera de las muchas ofertas que existen hoy en día.

De tal forma que no les quede otra a las grandes que plegarse a nuestras demandas de una tarifa más justa y mucho más barata
o atenerse a las consecuencias 
de seguir con su estafa.

En nuestra mano está que siga este robo o cortar por lo sano para que no nos sigan mangoneando

ARMAK de ODELOT

Canción del Indignado Global

(solo pá Mentes preclaras 

libres de Polvo y Cargas)

Si me han de matar que sea,
 un Trump que de frente va

  no un Obama traicionero, 

que me venga por detrás.


Éstos del bipartidismo, 

a nadie ya se la dan

Tanto monta, monta tanto,

ser sociata o liberal.


Que harto me tienen sus cuentos, 

de crisis y guerras sin más

Cuando no hay bandera que tape, 

la ansia de un criminal.


Daños colaterales son, 

inocentes masacrar

si lo hiciéramos con ellos, 

no habría ni una guerra más.


Por eso pasa que pasa, 

que nadie se alista ya

a no ser que la CIA pague,
 
como al ISIS del MOSAD


A mí, que nunca me busquen, 

ni me llamen pá luchar.

Que yo no mato por nadie. 

Yo mato por no matar.


La paz de los cementerios 

es la paz del capital

Si soy rojo es porque quiero, 

en vida, vivir en paz.


Hoy tan solo mata el hambre, 

del rico por tener más 

Con el cómplice silencio, 

de toítos los demás.


Que preferimos taparnos, 

los ojos pá no pensar

O mirar pá otro lado, 

pensando que el mal se irá.


Creer que lo que a otro pasa, 

no nos tiene que importar.

Cá palo aguante su vela, 

repetimos sin cesar.


Éste es el mantra egoísta 

que rula por la sociedad

como si lo que le pase a otro, 

no te pueda a tí pasar


Más todo, cuán boomerang vuelve, 

al sitio de donde partió

y tal vez ocupes mañana, 

el sitio que otro dejó.


Mil pobres ceban a un rico, 

otros mil le dan jornal,

y otros cuantos dan su vida 

porque todo siga igual. 


Que no me coman la oreja, 

que no me creo ya ná

de sus guerras, sus estafas, 

ni su calentamiento global


Tan solo vuestras mentiras, 

esconden una verdad

que unos pocos están arriba 

y abajo tós los demás.


Da igual que seas ateo, 

cristiano o musulmán.

Solo los elegidos, 

el paraíso verán.


Hay medios alternativos, 

amarillos muchos más.

Unos más rojos que otros. 

Los menos, de radikal.


Más todos tienen su cosa, 

y a todos hay que hojear

Que comparando se tiene 

opinión más general.


Qué de tó aprende uno. 

Nadie tiene la verdad.

Ser más papista que el Papa, 

no es garantía de ná.


Solo creo en lo que veo, 

díjome santo Tomás, 

que el que a ciegas se conduce, 

no para de tropezar.


Y al enemigo, ni agua, 

ni nunca contemporizar

No dudes, tarde o temprano, 

siempre te la jugará.


No hay que seguir a nadie 

y a todos hay que escuchar.

Si tu conciencia te guía, 

de nada te arrepentirás.


Dá gusto ver a los ricos, 

pegarse por serlo más

mientras en eso se hallen, 

quizás nos dejen en paz.


Si te crees o no sus mentiras, 

a ellos les dá igual.

Con tomarlas por veraces, 

les basta para actuar. 


Que no me cuenten más cuentos, 

que tós me los sé yo ya.

Se demoniza a cualquiera

que no se deje robar.



No basta con ser un santo, 

sino ser de"su santoral"

Como la cojan contigo, 

no te valdrá ni el rezar.


Pensamiento único llaman. 

Anteojeras pá no pensar

más que en la zanahoria. 

El palo irá por detrás.


Si no crees en lo dictado, 

anti-sistema serás

Y por mucho bien que hagas, 

te van a demonizar.


Que no me coman la oreja, 

que a mí, no me la dan.

Que me sé todos sus cuentos 

y también, cada final.


Si de cañon, quieren carne, 

pál matadero llevar

que busquen a otro tonto, 

que este tonto no va más



No se ha visto en tóa la historia, 

otra estafa sin igual.

Que la madre tóas las crisis, 

que creó el capital


Y cuando tan ricamente, 

uno estaba en su sofá

Relajado y a cubierto, 

de inclemencias y demás,


te cortan sin previo aviso

el grifo de tu maná. 


Y te dejan sin tus sueños,
 
sin trabajo y sin hogar


y pá colmo y regodeo 

de propios y extraños, van

y te dicen como aviso

que al rojo no hay que escuchar


que son peores que el lobo,

del cuento y mucho más

y que si vas y los votas

toíto te lo robarán.



Si como votantes, no nos escuchan

como consumidores lo harán.

Boicoetemos sus empresas

Llevamos las de ganar. 


Si no queda más remedio

que dejarnos de robar

que sea otro y no el de siempre

tal vez así, aprenderá


No hay pan pá tanto chorizo,

dicen, cuando lo que sobra es pan.

Lo que no hay es un par de huevos
 
pá que no nos choriceen más.


Resultado de imagen de eladio fernandez refugiados suecia

Ellos tienen de tó

los demás, cuasi-de-ná

mas ellos son cuatro mierdas

y nosotros sémos más.


La próxima revolución 

contra las corporaciones será

y si ésta no se gana 

no habrá ninguna ya más.

Quien sepa entender que entienda

lo que digo es pá mascar

despacio y con buena conciencia.

Mi tiempo no dá... pá más


Armak de Odelot


Dicen: 

No será televisada, 

la próxima revolución.

Más como nadie se fía 

de lo que se nos dice hoy en día,

pasamos los días enteros, 

tumbados en el sofá

delante la caja tonta,

 por no perder el momento
del pase de la procesión 
que tós llevamos por dentro