miércoles, 25 de octubre de 2017

¿Hay que tomar en serio la política de Estados Unidos contra Irán?

© Mohamed Sabra

¿Hay que tomar en serio la política de Estados Unidos contra Irán? 

por Thierry Meyssan


Posteriormente, al hacer uso de la palabra, el presidente Donald Trump insultó profusamente el legado del imam Rulah Khomeiny así como a los Guardianes de la Revolución y al Guía [3]. 

Trump se hizo además eco de todo tipo de viejas acusaciones, de las que incluso ya había sido exonerado el Hezbollah desde hace tiempo, y sentó las bases para acusarlo de estimular el resurgimiento de al-Qaeda. 

Antes de que el presidente terminara su intervención, el`precio del petróleo había subido en 85 cents el barril ya que el mercado apostó a un cese de las inversiones petroleras iraníes.
 
Durante las siguientes horas, todos los países occidentales y Rusia dijeron deplorar la agresividad de Donald Trump, mientras que Israel y Arabia Saudita la aplaudían. 

Sin embargo, las únicas decisiones que anunciaron el presidente Trump y el Departamento de Estado fueron la recompensa mencionada anteriormente y la “decertificación” del acuerdo 5+1 ante el Congreso de Estados Unidos [4] –esta última no es una decisión vinculada a las relaciones internacionales sino solamente un tema de política interna estadounidense. 

Pero el acuerdo del 14 de julio de 2015 fue adoptado por el Consejo de Seguridad de la ONU y sólo ese órgano internacional puede echarlo abajo. 

Por supuesto, todos los diplomáticos saben que tras ese acuerdo multilateral, Estados Unidos e Irán adoptaron un protocolo bilateral secreto que determina sus papeles respectivos en el Medio Oriente ampliado. 

En el momento en que escribo estas líneas, nadie puede decir si el presidente Trump ha cuestionado o no ese protocolo. 

Por consiguiente, todas las reacciones ante su discurso del 13 de octubre y ante los anuncios del Departamento de Estado son puro teatro. 

Las clases dirigentes de Estados Unidos e Irán se han apasionado siempre sobre el tema de las relaciones mutuas. 

Ya en el momento de la Revolución iraní de 1979, la administración Carter estaba tan profundamente dividida que el secretario de Estado Cyrus Vance y el consejero de seguridad nacional Zbigniew Brzezinski se enfrentaron entre sí y amenazaron –los dos– con dimitir si el presidente no seguía su consejo. 

Finalmente se impuso la opinión de Brzezinski, quien tuvo que disfrazar de toma de «rehenes» lo que en realidad fue la detención de los espías que trabajaban en la embajada de Estados Unidos en Teherán y se ridiculizó con el fracaso de su intento de liberarlos [5]. 

A partir de aquel incidente, las relaciones de Washington con Teherán siempre han sido una sucesión de mentiras mediáticas sin relación con la realidad. 

Desde el punto de vista iraní, el Reino Unido y Estados Unidos son depredadores y mentirosos que colonizaron y explotaron Irán y que hoy siguen aplastando a otros Estados que aún no se han rebelado. 

Es por eso que los iraníes acostumbran a designar al Reino Unido como el «Satán pequeño» y a Estados Unidos como el «Gran Satán». 

Según el ayatola Alí Khamenei, cada hombre digno de serlo tiene el deber de luchar contra las perversas maniobras de esos dos países. Por otro lado, no todo es obligatoriamente malo entre los anglosajones y no hay razones para dejar de hacer negocios con ellos. 

Durante la administración de Bush hijo, el vicepresidente Dick Cheney estuvo todo el tiempo conspirando con Londres y Tel Aviv para atacar a Teherán. 

Creó para ello el secretísimo Iran Syria Policy and Operations Group (Grupo de Política y Operaciones en Irán y Siria), alrededor de su hija Liz Cheney, y de un hombre experimentado en materia de operaciones secretas: Elliott Abrams. 

Y se planteó sucesivamente la posibilidad de bombardear Irán con armas nucleares y de respaldar un ataque aéreo israelí contra ese país desde aeropuertos alquilados a Georgia. 

Pero sucedió exactamente lo contrario: el presidente iraní Mahmud Ahmadineyad y el jefe del estado mayor conjunto estadounidense, el almirante Mike Mullen, se reunieron en secreto el 2 de marzo de 2008, en Bagdad. 

Al derrocar a los talibanes afganos y al presidente iraquí Saddam Hussein, Estados Unidos eliminó a los enemigos de Irán y favoreció la influencia regional de ese país. 

Bajo la administración Obama, la Casa Blanca trató de derrocar al presidente Ahmadineyad organizando la revolución de color de 2009. 

Tratando de sacar enseñanzas de fracasos anteriores, se puso en contacto con los opositores reunidos alrededor del ex presidente iraní Hachemi Rafsandjani. 

En 1983-1986, cuando el Consejo de Seguridad Nacional organizó la operación Irán-Contras, el coronel Oliver North y el sempiterno Elliott Abrams habían recurrido a un diputado iraní, el jeque Hassan Rohani, quien los puso en contacto con el hodjatoleslam Rafsandjani

Fue precisamente con estos personajes iraníes que la administracion Obama comenzó a conversar, en Omán, en marzo de 2013. 

Y gracias a una pirueta política, el candidato respaldado por el presidente Ahmadinejad no fue autorizado a presentarse a la elección presidencial que el jeque Rohani ganó 5 meses más tarde. Desde su llegada a la presidencia, Rohani comenzó a negociar oficialmente el acuerdo 5+1, que él mismo había concebido durante las negociaciones secretas en Omán.
 
Donald Trump, por su parte, mantuvo un discurso violentamente anti-iraní a lo largo de su campaña electoral. 

Su primer consejero de seguridad nacional, el general Michael Flynn, mantenía una posición similar. 

A pesar de ello, desde su llegada a la Casa Blanca, en enero de 2017, Trump ha ido eliminando uno a uno todos sus consejeros anti-iraníes –con excepción de Mike Pompeo, el actual director de la CIA. 

Por el contrario, sus 3 principales colaboradores –su director de gabinete, general John Kelly; el secretario de Defensa, general James Mattis; y el secretario de Estado, Rex Tillerson– son pro-iraníes. 

Resulta por cierto interesante observar que, en el momento de la nominación del secretario de Estado, la prensa favorable a Obama anunciaba como una certeza que el puesto quedaría en manos de… Elliott Abrams. El presidente tuvo un largo encuentro con él, lo interrogó sobre sus relaciones con el jeque Rohani, lo acompañó hasta la puerta… y nombró a Tillerson

Pudiera ser que el presidente Trump echara abajo el acuerdo irano-estadounidense en una jugada irreflexiva y, lo que sería mucho más grave, que arremetiera contra los Guardianes de la Revolución. 

Pero es mucho más probable que, una vez más, 
todo sea una comedia 
para apaciguar a sus aliados israelíes y sauditas. 

No podemos olvidar que Donald Trump no es un profesional de la política sino un promotor inmobiliario y que actúa como tal. 

Trump cosechó su éxito profesional sembrando el pánico con declaraciones excesivas y observando las reacciones que esas declaraciones provocaban entre sus adversarios y socios. 

Para saber cuál de esas dos hipótesis es la correcta, tendremos que esperar por las sanciones contra los Guardianes de la Revolución. Veremos entonces si son realmente serias o si no van más allá de la manera de actuar que caracteriza a Trump y de la farsa tradicional de Estados Unidos frente a Irán. 

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Si nos han de robar, 
que sean otros y no los mismos de siempre

Si como votantes, no nos escuchan
como consumidores, lo harán
boicoetemos sus empresas.
Llevamos las de ganar. 

Como acabar con la ESTAFA de las ELÉCTRICAS... de una puta vez pasando de los Vendepatrias del Bipartidismo

Ante el robo continuo y escandaloso por parte de las eléctricas y sus abusos en el recibo de la luz
propongo... 
actuar todos unidos como consumidores
contratando TODOS 
o en su defecto una gran mayoría,
  otra compañia eléctrica que no sea ninguna de estas dos (ENDESA - IBERDROLA) y cambiarnos a otra cualquiera de las muchas ofertas que existen hoy en día.

De tal forma que no les quede otra a las grandes que plegarse a nuestras demandas de una tarifa más justa y mucho más barata
o atenerse a las consecuencias 
de seguir con su estafa.

En nuestra mano está que siga este robo o cortar por lo sano para que no nos sigan mangoneando

ARMAK de ODELOT

Canción del Indignado Global

(solo pá Mentes preclaras 

libres de Polvo y Cargas)

Si me han de matar que sea,
 un Trump que de frente va

  no un Obama traicionero, 

que me venga por detrás.


Éstos del bipartidismo, 

a nadie ya se la dan

Tanto monta, monta tanto,

ser sociata o liberal.


Que harto me tienen sus cuentos, 

de crisis y guerras sin más

Cuando no hay bandera que tape, 

la ansia de un criminal.


Daños colaterales son, 

inocentes masacrar

si lo hiciéramos con ellos, 

no habría ni una guerra más.


Por eso pasa que pasa, 

que nadie se alista ya

a no ser que la CIA pague,
 
como al ISIS del MOSAD


A mí, que nunca me busquen, 

ni me llamen pá luchar.

Que yo no mato por nadie. 

Yo mato por no matar.


La paz de los cementerios 

es la paz del capital

Si soy rojo es porque quiero, 

en vida, vivir en paz.


Hoy tan solo mata el hambre, 

del rico por tener más 

Con el cómplice silencio, 

de toítos los demás.


Que preferimos taparnos, 

los ojos pá no pensar

O mirar pá otro lado, 

pensando que el mal se irá.


Creer que lo que a otro pasa, 

no nos tiene que importar.

Cá palo aguante su vela, 

repetimos sin cesar.


Éste es el mantra egoísta 

que rula por la sociedad

como si lo que le pase a otro, 

no te pueda a tí pasar


Más todo, cuán boomerang vuelve, 

al sitio de donde partió

y tal vez ocupes mañana, 

el sitio que otro dejó.


Mil pobres ceban a un rico, 

otros mil le dan jornal,

y otros cuantos dan su vida 

porque todo siga igual. 


Que no me coman la oreja, 

que no me creo ya ná

de sus guerras, sus estafas, 

ni su calentamiento global


Tan solo vuestras mentiras, 

esconden una verdad

que unos pocos están arriba 

y abajo tós los demás.


Da igual que seas ateo, 

cristiano o musulmán.

Solo los elegidos, 

el paraíso verán.


Hay medios alternativos, 

amarillos muchos más.

Unos más rojos que otros. 

Los menos, de radikal.


Más todos tienen su cosa, 

y a todos hay que hojear

Que comparando se tiene 

opinión más general.


Qué de tó aprende uno. 

Nadie tiene la verdad.

Ser más papista que el Papa, 

no es garantía de ná.


Solo creo en lo que veo, 

díjome santo Tomás, 

que el que a ciegas se conduce, 

no para de tropezar.


Y al enemigo, ni agua, 

ni nunca contemporizar

No dudes, tarde o temprano, 

siempre te la jugará.


No hay que seguir a nadie 

y a todos hay que escuchar.

Si tu conciencia te guía, 

de nada te arrepentirás.


Dá gusto ver a los ricos, 

pegarse por serlo más

mientras en eso se hallen, 

quizás nos dejen en paz.


Si te crees o no sus mentiras, 

a ellos les dá igual.

Con tomarlas por veraces, 

les basta para actuar. 


Que no me cuenten más cuentos, 

que tós me los sé yo ya.

Se demoniza a cualquiera

que no se deje robar.



No basta con ser un santo, 

sino ser de"su santoral"

Como la cojan contigo, 

no te valdrá ni el rezar.


Pensamiento único llaman. 

Anteojeras pá no pensar

más que en la zanahoria. 

El palo irá por detrás.


Si no crees en lo dictado, 

anti-sistema serás

Y por mucho bien que hagas, 

te van a demonizar.


Que no me coman la oreja, 

que a mí, no me la dan.

Que me sé todos sus cuentos 

y también, cada final.


Si de cañon, quieren carne, 

pál matadero llevar

que busquen a otro tonto, 

que este tonto no va más



No se ha visto en tóa la historia, 

otra estafa sin igual.

Que la madre tóas las crisis, 

que creó el capital


Y cuando tan ricamente, 

uno estaba en su sofá

Relajado y a cubierto, 

de inclemencias y demás,


te cortan sin previo aviso

el grifo de tu maná. 


Y te dejan sin tus sueños,
 
sin trabajo y sin hogar


y pá colmo y regodeo 

de propios y extraños, van

y te dicen como aviso

que al rojo no hay que escuchar


que son peores que el lobo,

del cuento y mucho más

y que si vas y los votas

toíto te lo robarán.



Si como votantes, no nos escuchan

como consumidores lo harán.

Boicoetemos sus empresas

Llevamos las de ganar. 


Si no queda más remedio

que dejarnos de robar

que sea otro y no el de siempre

tal vez así, aprenderá


No hay pan pá tanto chorizo,

dicen, cuando lo que sobra es pan.

Lo que no hay es un par de huevos
 
pá que no nos choriceen más.


Resultado de imagen de eladio fernandez refugiados suecia

Ellos tienen de tó

los demás, cuasi-de-ná

mas ellos son cuatro mierdas

y nosotros sémos más.


La próxima revolución 

contra las corporaciones será

y si ésta no se gana 

no habrá ninguna ya más.

Quien sepa entender que entienda

lo que digo es pá mascar

despacio y con buena conciencia.

Mi tiempo no dá... pá más


Armak de Odelot


Dicen: 

No será televisada, 

la próxima revolución.

Más como nadie se fía 

de lo que se nos dice hoy en día,

pasamos los días enteros, 

tumbados en el sofá

delante la caja tonta,

 por no perder el momento
del pase de la procesión 
que tós llevamos por dentro