El tiroteo en la Plaza de la Independencia de la capital ucraniana, que tuvo lugar en febrero de 2014, se cobró la vida de 49 manifestantes y cuatro agentes de seguridad. Sputnik presenta un vídeo con los testimonios de los francotiradores georgianos que estuvieron detrás del ataque contra ambos bandos del conflicto.
El 20 de febrero de 2014, en la Plaza de la Independencia de Kiev —también conocida como el Maidán—, francotiradores desconocidos abrieron fuego contra los participantes de las protestas. El ataque acabó con la vida de 53 personas.
Esta tragedia desencadenó la posterior crisis en el país.
Los países occidentales y los líderes de la oposición ucraniana acusaron al entonces presidente de la nación, Víktor Yanukovich, de ser responsable de esta mascare.
Sin embargo, la investigación oficial ha llegado a un callejón sin salida: los autores no han sido encontrados aún.
El corresponsal de Sputnik Andréi Veselov conversó con dos francotiradores georgianos, Koba Nergadze y Alexandre Revazashvili, que afirman haber participado en el tiroteo, así como con el general georgiano Tristán Tsitelashvili, quien fue el primero en revelar la implicación de sus compatriotas.
En la entrevista los dos involucrados dieron detalles de los acontecimientos en el Maidán y revelaron los nombres de las personas que, según sus declaraciones, orquestaron la provocación.
Dos francotiradores de origen georgiano revelaron su implicación directa en los sangrientos sucesos en la Plaza de la Independencia de Kiev el 20 de febrero de 2014.
En aquel entonces, la muerte de 53 personas por disparos de atacantes desconocidos selló el destino del país e inició un período de crisis profunda.
El periodista italiano Gian Micalessin fue de los primeros en indagar el lado oscuro de la masacre en Kiev, buscando las huellas de los francotiradores responsables del asesinato tanto de manifestantes como de agentes de la Policía.
Andréi Veselov, corresponsal de Sputnik, siguió la pista y logró encontrarse con los ciudadanos de Georgia entrevistados por su colega. Se trataba de Koba Nergadze y Alexandre Revazishvili, así como del exmilitar georgiano Tristán Tsitelashvili.
Los entrevistados están dispuestos a prestar idéntico testimonio ante un tribunal ucraniano. Rechazan sin embargo declarar personalmente en el país por temor a sufrir un atentado contra su vida. Los dos están listos para testificar por videoconferencia, y las leyes ucranianas lo permiten.
Sputnik publicó anteriormente la investigación de lo acontecido en el Maidán el 20 de febrero de 2014. Consulta la página para saber más:"Disparar a todos", testimonios reveladores de los francotiradores del Maidán
En el pasado, Nergadze y Revazishvili fueron militares y partidarios del expresidente georgiano, Mijaíl Saakashvili. Nergadze, a su vez, pasó cursos de entrenamiento en el extranjero, en concreto en Grecia, Alemania y Lituania.
Ambos francotiradores se esconden a día de hoy en Armenia. Los entrevistados afirman que muchos responsables del tiroteo en el Maidán fallecieron en extrañas circunstancias.
Yanukóvich: los francotiradores que 'trabajaban' en el Maidán vinieron de otros países
© Sputnik/ Serguei Pivovarov
El expresidente georgiano Saakashvili fue deportado de Ucrania justo después de que Sputnik anunciara sus planes de publicar la investigación.
Al día siguiente Saakashvili iba a testificar sobre el caso de los francotiradores en un tribunal ucraniano.
Además, Sputnik consiguió los testimonios oficiales de los tiradores de manos de sus abogados, Alexander Goroshinski y Stefan Reshko.
Esos dos juristas representan en los tribunales ucranianos a los exmiembros de la unidad especial Berkut, acusados de haber perpetrado las masacres del Maidán.
El artículo de Veselov se basa en sus conversaciones con los francotiradores.
Paralelamente, Sputnik publica el texto completo de los testimonios en ruso y su traducción al español para que cualquier persona pueda corroborar los datos presentados.
Haga clic en la imagen para expandirla y ver los dos documentos en paralelo:
© SPUTNIK/ SPUTNIK
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© Sputnik/ Sputnik
Por último, hay copias de los billetes que confirman la llegada de Nergadze y Revazishvili a Kiev durante el Maidán.
Los billetes electrónicos que confirman el viaje de Alexandre Revazishvili y Koba NergadzeFoto por: con un pasaporte falso a nombre de 'Georgii Karusamidze'
Sputnik
URL original:https://mundo.sputniknews.com/reportajes/201802141076253133-ucrania-golpe-estado-euromaidan-asesinatos-georgia/
Ucrania: "Disparar a todos" Testimonios reveladores de los francotiradores del Maidán
El ataque se cobró la vida de 53 personas: 49 manifestantes y cuatro agentes del orden público. La tragedia desencadenó la posterior crisis en el país.
Los líderes de la oposición y los representantes de los Estados Unidos y la UE acusaron inmediatamente "al régimen de Víctor Yanukovich", el presidente del país en la época, de la masacre.
Sin embargo, la investigación oficial ha llegado a un callejón sin salida: los responsables no han sido encontrados aún.
El corresponsal de Sputnik Andréi Veselov entrevistó a esos presuntos francotiradores. Vienen de Georgia.
Según ellos, recibieron sus órdenes de los propios líderes del Euromaidán, el movimiento que buscó el cambio del poder.
Más aún, afirman que les dieron una orden directa de disparar no solo a los policías, sino también a los propios manifestantes, para enardecer a la multitud y provocar una crisis política.
El hecho de que algunos francotiradores georgianos estuvieron involucrados en el tiroteo en Maidán fue revelado por primera vez por el general Tristán Tsitelashvili, excomandante de 'Avaza', la unidad de élite del Ejército georgiano.
Pero luego se convirtió en un 'némesis' del presidente georgiano en la época, Mijaíl Saakashvili, quien intentó achacar su derrota en la guerra a los militares.
Desde 2014 sabía que había nativos de Georgia en el Maidáncondicionados específicamente para disparar.
Algunos todavía están en el territorio de Ucrania y toman parte en las hostilidades [en el este del país].
Otros regresaron.
Tuvieron miedo de hablar durante mucho tiempo y ahora, también, tienen miedo. Como testigos innecesarios, simplemente pueden ser eliminados.
"La gente nos llamaba Sonderkommando"
Uno de los exmilitares georgianos a los que el general Tsitelashvili se refería es Koba Nergadze.
Como militar regular del Ejército georgiano, en 2003-2004 Nergadze participó en una serie de operaciones especiales en la región de Ergeneti, ubicada entre Georgia y Osetia del Sur.
Luchamos contra el contrabando. La región estaba dividida entre comerciantes georgianos y osetios.
Nuestra brigada perdió a 11 o 12 personas, no recuerdo exactamente. Las bajas totales del Ejército georgiano fueron 45.
En 2006 se retiró del Ejército con el rango de teniente primero y después de un tiempo se instaló en el Servicio de Seguridad del Ministerio de Defensa de Georgia bajo la protección de Mamuka Mamulashvili.
Hoy este mismo Mamulashvili es el comandante de la llamada 'legión georgiana', que participa en acciones armadas en el este de Ucrania al lado de la Kiev oficial.
Lo conocí en el Ejército, en un cumpleaños de mi amigo.
Oficialmente, nos ocupábamos de la seguridad de los mítines celebrados en Tiflis, para que no hubiera enfrentamientos entre partidarios y opositores de Saakashvili.
En realidad, la tarea fue reprimir manifestaciones de la oposición. Vigilábamos a los opositores.
En caso de necesidad, nuestros oficiales de servicio golpeaban a los líderes de la oposición por orden de los comandantes.
Como regla general, durante esas acciones llevábamos máscaras. La gente nos llamaba 'Sonderkommando'.
Nótese: 'Sonderkommando' es el nombre de las unidades especiales de la Alemania nazi, frecuentemente asociadas con los campos de concentración. En otros contextos puede significar una unidad especial convencional o de élite.
Usualmente los empleados del servicio escondían su lugar de trabajo.
En la conversación con Sputnik, Koba nombró algunos "precios" por sus servicios.
Así, por ejemplo, les pagaron 1.000 dólares estadounidenses por golpear a un diputado opositor.
En diciembre de 2013, Mamulashvili reunió a las "decenas" y ordenó "ir urgentemente a Ucrania para ayudar a los manifestantes".
Al grupo de Nergadze se le asignaron 10.000 dólares.
Les prometieron otros 50.000 tras regresar del viaje.
Utilizaron pasaportes falsos: el propio Koba llevaba un pasaporte a nombre de Georgii Karusamidze (nacido en 1977).
En Kiev, el grupo fue alojado en la calle Ushinski.
Y todos los días, como al trabajo, fueron al lugar del Maidán, a la Plaza de la Independencia.
Nos ordenaron monitorear el orden para que no hubiera embriaguez, mantener la disciplina, identificar a los provocadores.
El año nuevo Nergadze lo celebró en el hotel 'Ucrania', que ya estaba controlado por los manifestantes.
Otro exmilitar georgiano que llegó a Kiev en medio de los disturbios, fue Alexandre Revazishvili.
Después de servir en el Ejército en Georgia, se convirtió en activista de la organización de los partidarios de Saakashvili, 'Zona Libre'.
En sus propias palabras, "se metía en las filas de los opositores, provocaba riñas y buscaba peleas".
La 'Zona Libre' era dirigida por Koba Jabazi, fue él quien presentó a Alexandre y Mamulashvili.
Este último se interesó en su antigua especialidad militar: en el ejército, Revazishvili había sido francotirador.
A mediados de febrero, Revazishvili, Jabazi y otros cuatro representantes de la 'Zona Libre' volaron a Kiev en un vuelo de la aerolínea estatal ucraniana, 'Ukraine International Airlines'.
Se alojaron en la calle Vozdujoflotskaya para luego pasar a un conservatorio, tomado por la oposición.
"Serguéi Pashinski llevó las armas"
"El 14 o 15 de febrero reunieron a los jefes de los grupos (a mí, a Kikabidze, Makiashvili, Saralidze y otros cuyos nombres no recuerdo) en el tercer piso del hotel Ucrania en una habitación privada.
Allí estaban Parubi y Pashinski", recuerda Nergadze.
A la reunión también asistió un tal Christopher Bryan, que se presentó como un exsoldado estadounidense.
Parubi habló con nosotros: 'Necesitamos ayudar al pueblo hermano y pronto tendremos una misión'. Pero no hubo más aclaraciones.
Para entonces ya había a visto las armas en manos de los manifestantes: rifles de caza y pistolas.
En la tarde del 19 de febrero, volvieron al hotel Serguéi Pashinski y varios tipos desconocidos con bolsas grandes.
Llevaron las carabinas SKS, fusiles de asalto Kalashnikov de calibre 7,62, así como un rifle de francotirador SVD y una carabina de producción extranjera.
Pashinski nos explicó que las armas eran 'para defenderse' pero a mi pregunta 'de quién defenderse', no respondió y salió de la habitación.
El ataque se cobró la vida de 53 personas: 49 manifestantes y cuatro agentes del orden público. La tragedia desencadenó la posterior crisis en el país.
Los líderes de la oposición y los representantes de los Estados Unidos y la UE acusaron inmediatamente "al régimen de Víctor Yanukovich", el presidente del país en la época, de la masacre.
Sin embargo, la investigación oficial ha llegado a un callejón sin salida: los responsables no han sido encontrados aún.
El corresponsal de Sputnik Andréi Veselov entrevistó a esos presuntos francotiradores. Vienen de Georgia.
Según ellos, recibieron sus órdenes de los propios líderes del Euromaidán, el movimiento que buscó el cambio del poder.
Más aún, afirman que les dieron una orden directa de disparar no solo a los policías, sino también a los propios manifestantes, para enardecer a la multitud y provocar una crisis política.
El hecho de que algunos francotiradores georgianos estuvieron involucrados en el tiroteo en Maidán fue revelado por primera vez por el general Tristán Tsitelashvili, excomandante de 'Avaza', la unidad de élite del Ejército georgiano.
Pero luego se convirtió en un 'némesis' del presidente georgiano en la época, Mijaíl Saakashvili, quien intentó achacar su derrota en la guerra a los militares.
Desde 2014 sabía que había nativos de Georgia en el Maidáncondicionados específicamente para disparar.
Algunos todavía están en el territorio de Ucrania y toman parte en las hostilidades [en el este del país].
Otros regresaron.
Tuvieron miedo de hablar durante mucho tiempo y ahora, también, tienen miedo. Como testigos innecesarios, simplemente pueden ser eliminados.
"La gente nos llamaba Sonderkommando"
Uno de los exmilitares georgianos a los que el general Tsitelashvili se refería es Koba Nergadze.
Como militar regular del Ejército georgiano, en 2003-2004 Nergadze participó en una serie de operaciones especiales en la región de Ergeneti, ubicada entre Georgia y Osetia del Sur.
Luchamos contra el contrabando. La región estaba dividida entre comerciantes georgianos y osetios.
Nuestra brigada perdió a 11 o 12 personas, no recuerdo exactamente. Las bajas totales del Ejército georgiano fueron 45.
En 2006 se retiró del Ejército con el rango de teniente primero y después de un tiempo se instaló en el Servicio de Seguridad del Ministerio de Defensa de Georgia bajo la protección de Mamuka Mamulashvili.
Hoy este mismo Mamulashvili es el comandante de la llamada 'legión georgiana', que participa en acciones armadas en el este de Ucrania al lado de la Kiev oficial.
Lo conocí en el Ejército, en un cumpleaños de mi amigo.
Oficialmente, nos ocupábamos de la seguridad de los mítines celebrados en Tiflis, para que no hubiera enfrentamientos entre partidarios y opositores de Saakashvili.
En realidad, la tarea fue reprimir manifestaciones de la oposición. Vigilábamos a los opositores.
En caso de necesidad, nuestros oficiales de servicio golpeaban a los líderes de la oposición por orden de los comandantes.
Como regla general, durante esas acciones llevábamos máscaras. La gente nos llamaba 'Sonderkommando'.
Nótese: 'Sonderkommando' es el nombre de las unidades especiales de la Alemania nazi, frecuentemente asociadas con los campos de concentración. En otros contextos puede significar una unidad especial convencional o de élite.
Usualmente los empleados del servicio escondían su lugar de trabajo.
En la conversación con Sputnik, Koba nombró algunos "precios" por sus servicios.
Así, por ejemplo, les pagaron 1.000 dólares estadounidenses por golpear a un diputado opositor.
En diciembre de 2013, Mamulashvili reunió a las "decenas" y ordenó "ir urgentemente a Ucrania para ayudar a los manifestantes".
Al grupo de Nergadze se le asignaron 10.000 dólares.
Les prometieron otros 50.000 tras regresar del viaje.
Utilizaron pasaportes falsos: el propio Koba llevaba un pasaporte a nombre de Georgii Karusamidze (nacido en 1977).
En Kiev, el grupo fue alojado en la calle Ushinski.
Y todos los días, como al trabajo, fueron al lugar del Maidán, a la Plaza de la Independencia.
Nos ordenaron monitorear el orden para que no hubiera embriaguez, mantener la disciplina, identificar a los provocadores.
El año nuevo Nergadze lo celebró en el hotel 'Ucrania', que ya estaba controlado por los manifestantes.
Otro exmilitar georgiano que llegó a Kiev en medio de los disturbios, fue Alexandre Revazishvili.
Después de servir en el Ejército en Georgia, se convirtió en activista de la organización de los partidarios de Saakashvili, 'Zona Libre'.
En sus propias palabras, "se metía en las filas de los opositores, provocaba riñas y buscaba peleas".
La 'Zona Libre' era dirigida por Koba Jabazi, fue él quien presentó a Alexandre y Mamulashvili.
Este último se interesó en su antigua especialidad militar: en el ejército, Revazishvili había sido francotirador.
A mediados de febrero, Revazishvili, Jabazi y otros cuatro representantes de la 'Zona Libre' volaron a Kiev en un vuelo de la aerolínea estatal ucraniana, 'Ukraine International Airlines'.
Se alojaron en la calle Vozdujoflotskaya para luego pasar a un conservatorio, tomado por la oposición.
"Serguéi Pashinski llevó las armas"
"El 14 o 15 de febrero reunieron a los jefes de los grupos (a mí, a Kikabidze, Makiashvili, Saralidze y otros cuyos nombres no recuerdo) en el tercer piso del hotel Ucrania en una habitación privada.
Allí estaban Parubi y Pashinski", recuerda Nergadze.
A la reunión también asistió un tal Christopher Bryan, que se presentó como un exsoldado estadounidense.
Parubi habló con nosotros: 'Necesitamos ayudar al pueblo hermano y pronto tendremos una misión'. Pero no hubo más aclaraciones.
Para entonces ya había a visto las armas en manos de los manifestantes: rifles de caza y pistolas.
En la tarde del 19 de febrero, volvieron al hotel Serguéi Pashinski y varios tipos desconocidos con bolsas grandes.
Llevaron las carabinas SKS, fusiles de asalto Kalashnikov de calibre 7,62, así como un rifle de francotirador SVD y una carabina de producción extranjera.
Pashinski nos explicó que las armas eran 'para defenderse' pero a mi pregunta 'de quién defenderse', no respondió y salió de la habitación.
Yanukóvich: los francotiradores que 'trabajaban' en el Maidán vinieron de otros países
Los francotiradores que dispararon en febrero de 2014 durante el 'Euromaidán' en la plaza de la Independencia, en Kiev, arribaron a Ucrania de otros países, dijo el expresidente, Víktor Yanukóvich, en el tribunal del distrito de Dorogomilovski de Moscú, a requerimiento del demandante, el exdiputado de la Rada Suprema Vladímir Oleinik.
"Había información de que los francotiradores llegaron a Ucrania de otros países, muchos de ellos iban enmascarados. Disparaban desde los edificios controlados por el 'Maidán'.
Los intentos de entrar en aquellos edificios fueron frenados", explicó.
Yanukóvich no especificó de qué países provenían los francotiradores.
© AP Photo/ Geert Vanden Wijngaert
Durante las semanas posteriores, el Maidán se convirtió en el epicentro de la confrontación entre los radicales y la Policía, con un saldo de numerosas víctimas mortales en ambas partes.
Un periodista italiano logró entrevistar a tres francotiradores georgianos que actuaron durante el Maidán y comprobó su relación con el expresidente de Georgia Mijaíl Saakashvili.
El periodista y el autor del estudio 'Ucrania, las verdades ocultas', Gian Micalessin, cuenta cómo pudo localizar a los tiradores para la entrevista de Sputnik.
Hace tiempo que Micalessin logró ponerse en contacto con los francotiradores georgianos, sin embargo, ellos se negaron a otorgarle información.
El periodista siguió insistiendo y en verano de 2017 su colega de Georgia le comunicó que los tiradores estaban dispuestos a hacer una entrevista.
El periodista entrevistó a dos francotiradores georgianos con la intención de comprobar si habían estado involucrados en el conflicto ucraniano.
Su historia coincidía con las dos anteriores y con la cronología de los acontecimientos relacionados con el Maidán", explica Micalessin.
Según la versión oficial ucraniana, eran personas relacionadas con el expresidente ucraniano Víctor Yanukóvich las que dispararon durante el Maidán.
Así, hasta el canciller de Estonia —simpatizante de la oposición ucraniana— expresaba dudas acerca de esa historia.
Sobre el tema: Consejo de Europa recuerda que dio recomendaciones para investigar muertes en Maidán
La investigación de Micalessin podría disipar la incertidumbre y llegar a ser sensacional en lo tocante al tiroteo, sin embargo, los medios italianos prefirieron guardar silencio total.
El periodista lo calificó como una actitud bastante extraña, ya que al asunto ucraniano influyó sobre la economía de Italia.
"No nos olvidemos de que las sanciones europeas soportadas por Italia nos costaron 3.000 millones de euros.
Además, nos metieron en las iniciativas militares de la OTAN (…) lo que crea cierta tensión en nuestras relaciones con Moscú
(…) Si todo esto es una consecuencia de lo que jamás había sucedido en realidad, haría falta prestar más atención a las declaraciones de los francotiradores.", explica Micalessin.
El periodista italiano añade que él ha recibido insultos y amenazas desde Ucrania, mientras que los colegas rusos han elogiado la importancia de su investigación.
La Plaza Maidan, en el centro de Kiev, la capital de Ucrania |
El Golpe de Estado fascista en Ucrania cumple 4 años (Maidan 2)
La Plaza Maidan, en el centro de Kiev, la capital de Ucrania
El teniente Koba Nergadzé es una de las personas de las que habla el general Tsitelashvili. Oficial de carrera del ejército georgiano, en 2003-2004 participó en varias operaciones militares cerca de Ergeneti, entre Georgia y Osetia del sur.
“Hemos luchado contra el contrabando. La región estaba dividida entre los comerciantes georgianos y osetios. A veces ha habido conflictos, incluidos enfrentamientos directos con las fuerzas armadas osetias.
Nuestra brigada perdió 11 ó 12 hombres, no recuerdo exactamente. El ejército georgiano perdió un total de 45 soldados”, dice Nergadze.
En 2006 Nergadzé renunció a las unidades de combate y comenzó a trabajar en el Servicio de Seguridad del Ministerio de Defensa georgiano con el apoyo de Mamuka Mamukashvili. En la actualidad, Mamukashvili es el comandante de la Legión de Georgia que participa en operaciones armadas en el este de Ucrania en la parte de Kiev. “Lo conocí en el ejército en el cumpleaños de mi amigo Bejo”, añade Koba.
“Oficialmente proporcionamos seguridad, entre otras, durante las concentraciones de Tbilisi para evitar enfrentamientos entre simpatizantes y oponentes de Saakashvili. De hecho, se nos ordenó suprimir las manifestaciones de la oposición y vigilar a los miembros de la oposición”, admite Nergadzé.
Si era necesario, los militares de nuestro servicio atacaban a los dirigentes de la oposición por orden de los comandantes. Normalmente se hacía de manera encubierta. Nos llamaban los“Sonderkommando”(*), dice el teniente.
En 2006 Nergadzé renunció a las unidades de combate y comenzó a trabajar en el Servicio de Seguridad del Ministerio de Defensa georgiano con el apoyo de Mamuka Mamukashvili. En la actualidad, Mamukashvili es el comandante de la Legión de Georgia que participa en operaciones armadas en el este de Ucrania en la parte de Kiev. “Lo conocí en el ejército en el cumpleaños de mi amigo Bejo”, añade Koba.
“Oficialmente proporcionamos seguridad, entre otras, durante las concentraciones de Tbilisi para evitar enfrentamientos entre simpatizantes y oponentes de Saakashvili. De hecho, se nos ordenó suprimir las manifestaciones de la oposición y vigilar a los miembros de la oposición”, admite Nergadzé.
Si era necesario, los militares de nuestro servicio atacaban a los dirigentes de la oposición por orden de los comandantes. Normalmente se hacía de manera encubierta. Nos llamaban los“Sonderkommando”(*), dice el teniente.
Los oficiales se dividieron en grupos de diez. Nergadzé era uno de los dirigentes.
También menciona a Gueorgui Sralidze, Merab Kikabidze, David Makiashvili.
Koba especificó ciertas tarifas. Por asesinar a un miembro de la oposición, recibieron 1.000 dólares.
En diciembre de 2013 Mamulashvili reunió a los dirigentes de los grupos de diez y les propuso pasar a Ucrania para ayudar a los manifestantes.
En diciembre de 2013 Mamulashvili reunió a los dirigentes de los grupos de diez y les propuso pasar a Ucrania para ayudar a los manifestantes.
Al grupo de Nergadzé le entregaron 10.000 dólares y le prometieron otros 50.000 para después del regreso de la misión. Viajaron con pasaportes falsos.
En Kiev el grupo se alojó en la calle Uchinski. Todos los días iban a Maidan, como quien va a la oficina.
“Se nos ordenó ejercer de fuerza pública para evitar borracheras, mantener la disciplina y detectar provocadores del lado del gobierno”, dice el oficial.
(*) Durante el III Reich los “Sonderkommando” (comandos especiales, en alemán) eran unidades formadas por presos políticos seleccionados para trabajar en las cámaras de gas y en los crematorios en los campos de concentración nazis.
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