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McDonald’s responde al incremento del salario mínimo prescindiendo de los trabajadores
CÓMO REACCIONA EL CAPITAL CUANDO LOS SOCIALDEMÓCRATAS INTENTAN "EMBELLECER" EL SISTEMA
El capitalismo de “rostro amable” que la socialdemocracia promete – a pesar de sus estrepitosos fracasos prácticos a lo largo de la historia - se basa en la idea quimérica de que, sin eliminar este sistema, es posible convertir a los capitalistas en empresarios responsables (...).
POR JULIO ANDRÉS CAPEY/CANARIAS-SEMANAL.ORG.-
El capitalismo de “rostro amable” que la socialdemocracia promete – apesar de sus estrepitosos fracasos en la práctica- se basa en la idea quimérica de que, sin eliminar este sistema, es posible convertir a los capitalistas en empresarios responsables, mediante estrictas formas de control legal que les obligue a realizar una distribución “justa” de las riquezas.
La respuesta que la multinacional McDonald’s ha dado a la implantación del salario mínimo de 15 dólares por hora de trabajo, aprobada en Estados Unidos recientemente por iniciativa del gobierno de Obama, constituye otra muestra elocuente de lo absurdo que resulta pretender “humanizar el capitalismo”.
Lo que ha anunciado la multinacional para burlar la nueva legislación laboral, en los 14.000 establecimientos que tiene en EE.UU., deja casi si efectos la normativa aludida.
Según indican diferentes fuentes de prensa, McDonald’s ha decidido sustituir empleados por máquinas en aquellos restaurantes en las que los trabajadores cobrarían sueldos más altos con la entrada en vigor de la nueva ley de salario mínimo.
Para este propósito, la compañía utilizará pantallas táctiles automáticaspara eliminar el departamento encargado del control del personal.
Los cambios ya han comenzado a materializarse en sus restaurantes de las ciudades de Florida, Nueva York y el Sur de California, lugares donde 500 de ellos han sido equipados con ese sistema de control de los empleados.
Por su parte, los restaurantes de San Francisco, Boston, Chicago, Washington D.C. y Seattle serán provistos de los paneles a principios del venidero 2017.
Pero tampoco quedará ahí el proceso de sustitución de trabajadores por maquinaria. Según dio a conocer 'CNNMoney', en 2017 la compañía prevé que los clientes puedan hacer sus pedidos directamente a través del móvil, por lo que también “le sobrarán” todos los dependientes que actualmente toman esos pedios.
Y aún hay más. McDonald’s no solo se propone que los más de 20 millones de clientes que tiene en EE.UU. comiencen a hacer sus pedidos a través de pantallas táctiles o dispositivos móviles-, sino también que sus solicitudes sean entregadas a los clientes en sus mesas por robots, de acuerdo con una nota publicada en el diario digital 'The New American'.
“Es solo cuestión de tiempo que los dependientes humanos sean también reemplazados por máquinas" -se apuntaba en este periódico.
El ejemplo descrito es solo uno de los muchos que ejemplifican que resulta imposible controlar al capital por la vía legal, y mucho menos con invocaciones a la moralidad o la responsabilidad empresarial.
La ilusión de que el establecimiento de un salario mínimo garantizará el incremento del nivel de vida de los trabajadores, reducirá la pobreza y la desigualdad no encuentra respaldo en la realidad.
Rensi, exdirector ejecutivo de la multinacional, no ha dudado en advertir de cuál sería sus reacción ante esta eventualidad.
"Les garantizo que si el salario de 15 dólares se implanta en el país veremos una pérdida de puestos de trabajo difícil de creer. Es más barato comprar un robot de 35.000 dólares que contratar a un empleado improductivo que cobra 15 dólares la hora por meter patatas fritas en bolsas".
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