Sí, Israel está ejecutando palestinos sin juicio
En 2016, uno no tiene que ser Adolf Eichmann para ser ejecutado en Israel - es suficiente con ser una niña palestina adolescente con tijeras.
Deberíamos llamar a las cosas como son:
Israel mata a gente sin juicio casi todos los días.
Cualquier otra descripción es una mentira.
Si en su día se discutió una vez aquí
sobre la pena de muerte para los terroristas,
ahora se ejecutan sin juicio (y sin discusión).
Si una vez hubo debate sobre las reglas a seguir
en el combate contra el terrorismo, hoy está claro:
se puede disparar a matar a cualquier palestino sospechoso.
El ministro de Seguridad Pública Gilad Erdan esbozó la situación con claridad cuando dijo: "Todos los terroristas deben saber que no va a sobrevivir al ataque que estén a punto de cometer" - y casi todos los políticos se unió a él al unísono nauseabunda, de Yair Lapid en adelante. Nunca tantas licencias para matar han sido entregadas aquí.
En 2016, uno no tiene que ser Adolf Eichmann para ser ejecutado aquí - es suficiente ser una niña palestina adolescente con tijeras.
Los pelotones de fusilamiento están activos todos los días. Soldados, policías y civiles disparan contra los que apuñalan a israelíes, o trató de apuñalarlos o eran sospechosos de hacerlo, y a los que atropellan israelíes con sus coches o parece que van ha hacerlo.
En la mayoría de los casos, no hubo necesidad de disparar
- y ciertamente no para matar.
En una buena parte de los casos,
las vidas de los tiradores no estaban en peligro.
Dispararon a matar a gente que llevaban una navaja o incluso unas tijeras, o a personas que simplemente poníann sus manos en sus bolsillos o perdieron el control de su coche.
Ellos les dispararon a muerte indiscriminadamente - hombres, mujeres, adolescentes, niños adolescentes. Ellos les dispararon cuando estaban de pie, e incluso después de que ya no eran una amenaza. Le dispararon a matar, para castigar, para liberar su ira, y para vengarse. Hay tal desprecio aquí que estos incidentes apenas se cubren en los medios.
El pasado sábado, los soldados en el puesto de control Beka'ot (llamado Hamra por los palestinos) en el Valle del Jordán mataron al empresario Said Abu al-Wafa, de 35 años, padre de cuatro hijos, con 11 balas. Al mismo tiempo, también mataron a Ali Abu Maryam, un trabajador agrícola de 21 años de edad y estudiante, con tres balas.
Las Fuerzas de Defensa de Israel no explicó la muerte de los dos hombres, excepto para decir que había una sospecha de que alguien había cogido un cuchillo. Hay cámaras de seguridad en el sitio, pero el ejército israelí no ha lanzado un video del incidente.
El mes pasado, otros soldados de las FDI mataron a Nashat Asfur, padre de tres hijos que trabajaba en un matadero de pollos israelí. Le dispararon en su pueblo, Sinjil, desde 150 metros de distancia, mientras caminaba a casa tras una boda.
A principios de este mes, Mahdia Hammad - una madre de 40 años de edad, de cuatro - se dirigía a su casa a través de su pueblo, Silwad. Los agentes de policía de fronteras rociaron su auto con decenas de balas porque sospechaban que tenía la intención de atropellarlos.
Los soldados hicieron lo mismo con la estudiante de cosmetología Samah Abdallah, de 18 años, ni siquiera era sospechosa de cualquier cosa.
Los soldados la mataron al disparar al coche de su padre "por error", matarla; habían sospechado de un peatón de 16 años de edad, Alaa al-Hashash, de tratar de apuñalarlos. Ellos lo ejecutaron también, por supuesto.
Ellos también mataron a Ashrakat Qattanani, 16, que sostenía un cuchillo y corría detrás de una mujer israelí. Primero un colono le atropelló con su coche, y cuando ella yacía herida en el suelo, los soldados y los colonos le dispararon al menos cuatro veces. Ejecución - ¿qué más?
Y cuando los soldados dispararon a Lafi Awad, de 20, en su espalda mientras huía después de lanzar piedras, no era una ejecución?
Estos son sólo algunos de los casos que he documentado en los últimos semana en Haaretz. La página web del grupo de derechos humanos B'Tselem tiene una lista de 12 más casos de ejecuciones.
El ministro de Exteriores sueco, Margot Wallström, uno de los pocos ministros con conciencia que queda en el mundo, exigió que estos asesinatos sean investigados. No hay demanda más moral y justa que esta. Debería haber venido de nuestro propio ministro de Justicia.
Israel respondió con sus aullidos habituales. El primer ministro dijo que esto era "escandaloso, inmoral e injusta." Y Benjamin Netanyahu entiende esos términos: Eso es exactamente cómo describir la campaña de ejecuciones criminales de Israel bajo su liderazgo.
http://www.haaretz.com/opinion/.premium-1.697788
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