domingo, 31 de julio de 2016

Pekín construirá 20 plantas nucleares en el mar de China Meridional

Las disputadas islas Spratly, ubicadas en el mar de la China Meridional.

Pekín construye 20 plantas nucleares en el mar de China Meridional

China planea construir 20 plantas nucleares en el mar de China Meridional para establecer 'un control efectivo' sobre las islas en disputa, informó un diario chino.
"La construcción de plataformas marinas de energía nuclear será utilizada para apoyar el control efectivo de China en el mar de la China Meridional", informó el periódico chino 'Global Times', dos días después de que la Corte Permanente de Arbitraje de La Haya fallara a favor de Filipinas en su litigio con Pekín sobre las islas Spratly y las Paracelso.
Citando a la Corporación Nuclear Internacional de China (CNNC), el rotativo anunció que el gigante asiático utilizará las centrales nucleares en las islas y arrecifes de las islas Spratly, en el área disputada, "para garantizar agua dulce".
La construcción de las plataformas marinas de energía nuclear será utilizada para apoyar el control efectivo de China en el mar de la China Meridional", informó el periódico chino Global Times.
La CNNC estima que el megaproyecto costará unos 5,98 millones de dólares, menos incluso que el costo de una flota de portaaviones. Aunque la CNNC eliminó la información de su página Web, un miembro del personal de la empresa comunicó a la agencia AFP que el texto "necesita confirmar" su precisión.
El 12 de julio el Tribunal Permanente de Arbitraje de La Haya anunció que China no tiene "derecho histórico" sobre los territorios en disputa en el mar de la China Meridional.
En respuesta China declaró que como no había participado en ninguna discusión de la Corte, el voto emitido no vale nada. Además, niega que La Haya tenga competencia para dirimir el caso y afirma que, debido a su uso histórico de las aguas y los peñones, tiene derecho a casi el 90 % del mencionado mar.

En reacción al fallo de La Haya, China ha reforzado su presencia militar en el mar de la China Meridional con un patrullaje aéreo e instalando un nuevo destructoren la zona, además, está llevado a cabo grandes maniobras militares.
ftm/ncl/rba
Soldados chinos hacen guardia en las islas Spratly
Soldados chinos hacen guardia en las islas Spratly
 REUTERS/STRINGER




















    El país asiático reclama casi la totalidad de la zona

    Pekín continúa con su estrategia de expansión en el mar Meridional de China

    Fernando Arancón  @feraru92 

    Las ambiciones geopolíticas de China en los mares del sudeste asiático parecen ser inamovibles. 

    La reciente sentencia del Tribunal Permanente de Arbitraje de La Haya es papel mojado para Pekín, y las continuas quejas de los estados vecinos, caso de Filipinas, Vietnam o Japón, no son más que el hilo musical de su expansión por Asia-Pacífico. 

    Ni siquiera Estados Unidos está suponiendo un freno real. 



    Es por ello que las aguas de los mares de China están cada vez más caldeadas.

    Como un elefante por una cacharrería. 

    Así se puede definir la estrategia de China en su mar meridional. Sin concesiones, con un rumbo fijo y sin discreción alguna

    Aun así, calificar este método de imprudente sería tan acertado como catalogarlo de eficaz. 

    China está siendo un rodillo en aquellas zonas más críticas para su geoestrategia regional, algo que a menudo se enlaza con sus necesidades económicas y energéticas. 


    Esta forma de materializar sus intereses está cumpliendo a buen ritmo con los objetivos establecidos, eso sí, a costa de haber posicionado las Spratly como uno de los lugares con mayor tensión del mundo.

    No es casualidad por tanto que el pasado 12 de julio el Tribunal Permanente de Arbitraje de La Haya le diese la razón a Filipinas en su contencioso con China. 

    El motivo de la disputa: unas islas reclamadas por ambas partes, ocupadas por Pekín y cuya propiedad se sobreentienden de Filipinas. 

    Legalmente, un varapalo considerable a la política del Imperio del Medio; a nivel efectivo, poco más que un leve tirón de orejas.

    La estrategia china: divide y vencerás

    Poco más de dos meses y medio antes del veredicto, en abril, la agencia de noticias oficial china Xinhua, se hacía eco de la finalización de un potente faro en una de las islas Spratly. 

    Como medio oficial de Pekín, argumentaba los enormes beneficios que una infraestructura de estas características traería a la navegación en la zona. 


    Ninguna referencia a los hidrocarburos; ninguna referencia a cualquier tipo de equipamiento militar. 

    Solo las bondades de la torre luminosa que es casi tan grande como la isla en la que se asienta.

    Así, China intenta vender por todos los medios una imagen conciliadora, de potencia responsable que está allí para aportar y no para satisfacer sus intereses. 


    Para su desgracia, el cúmulo de acciones que rozan lo hostil sepultan de manera inmisericorde los esfuerzos propagandísticos de la agencia estatal.

    Las Spratly son un sembrado de islas diminutas, arrecifes y bancos de arena
    Y es que las Spratly son poco más que un sembrado deislas diminutas, arrecifes y bancos de arena próximos a la superficie o levemente emergidos. 

    En definitiva, un pésimo lugar por el que navegar. 

    Sin embargo, son un magnífico enclave en este siglo XXI para controlar el tráfico marítimo de la región de Asia-Pacífico, un continuo ir y venir de portacontenedores y petroleros con origen o destino en los puertos de China, Japón o Singapur. 

    Si a semejante valor le añadimos las sospechas de generosos yacimientos de hidrocarburos, algo que China necesita desesperadamente, el cóctel de elementos propicios para un conflicto está servido.


    Las islas Spratly como centro de la disputa

    Estas apetencias chinas tienen cerca de siete décadas, aunque los problemas actuales son del siglo XXI. 

    Las Spratly, como otros territorios insulares, entran dentro de la llamada “Línea de los Nueve Puntos”, una reclamación de máximos de los mares circundantes basada en la presencia y propiedad china de esos pequeños territorios desde hace siglos. 

    Otro episodio de derechos por motivos históricos.

    Vietnam, Filipinas, Malasia y Taiwan reclaman partes del archipiélago
    Mientras los otros países presentes en las Spratly como Vietnam, Filipinas, Malasia o Taiwan solo reclaman partes del archipiélago, China reclama su totalidad. 

    Qué decir tiene que son pretensiones irreales teniendo en cuenta que apenas ocupa el 10% de los puestos y tierras emergidas de los que consta la zona. 

    Sin embargo, su lejanía respecto a controlar la totalidad del archipiélago lo compensa con creces dotando a sus islas de una infraestructura y un valor muy superior al de los vecinos.


    Así, fue toda una sorpresa –empezando por Estados Unidos- ver cómo China había reconvertido bancos de arena en islas con puerto, algunas defensas e incluso pistas para aviones. 

    Para muchos fue la señal definitiva de que Pekín piensa apostar fuerte, ya que les permitiría tener infraestructura capaz de alojar equipo militar, especialmente naval y aéreo.

    Qué decir tiene que a Filipinas le hace poca ilusión tener una base aeronaval china en la puerta de casa.

    Estados Unidos, el juez que no cree en la ley

    A pesar de que los países asiáticos tienen un rival claramente definido, son incapaces de generar un frente común ante las aspiraciones chinas. 

    El único país que se ha atrevido a intentar contrarrestar el proyecto de Pekín es Estados Unidos, no sin ser consciente de que muchas de sus acciones andan cerca de la provocación.

    Estados Unidos es el único país que se ha atrevido a intentar contrarrestar el proyecto de Pekín
    Desde Washington insisten en una solución dialogada al mismo tiempo que reclaman el libre tránsito por las aguas de las Spratly cada vez que un destructor norteamericano surca esa zona. 

    Más no pueden hacer; la disuasión militar de bajo perfil es la única salida para ellos. 

    Hacer notar a China que ellos están siempre presentes.

    Lo lógico sería que sentasen a China a negociar, o incluso a imponer, como ha ocurrido con el tribunal de La Haya, una solución a esta cuestión marítima. 


    El principal problema –para EE.UU. y sus aliados, no para China- es que Washington no reconoce la Ley del Mar de 1982, y por tanto pierde toda legitimidad de cara a imponer, o ni siquiera a sugerir, una solución encaminada por esa vía.

    Semejante contradicción es enarbolada por Pekín para escudarse en sus derechos históricos.

    Un conflicto demasiado peligroso

    Los años avanzan y la situación, lejos de mejorar, ni siquiera se estanca. Empeora. 

    China no concibe otro fin que la completa soberanía del archipiélago, al mismo tiempo que el resto de países saben que una concesión aquí sería abrirle la puerta a Pekín de cara a controlar buena parte de Asia-Pacífico.

    Numerosos analistas coinciden en que la cuestión de las Spratly está tomando un cariz peligroso


    Si China pretende avanzar y el resto de países no piensan retroceder, el choque está garantizado. 

    La pregunta, por tanto, es cuánto –y cuándo- van a tener que verle las orejas al lobo antes de entender que el camino actual no tiene salida. Puede ser mediante una leve crisis diplomática o puede ser con un conflicto armado


    http://www.bez.es/115029134/Pekin-continua-con-su-estrategia-de-expansion-en-el-mar-Meridional-de-China.html









    Proyectan vídeo sobre Mar Meridional de China en la neoyorkina Times Square

    Proyectan vídeo sobre Mar Meridional de China en la neoyorkina Times Square
    Un vídeo sobre el Mar Meridional de China está siendo proyectado desde hace unos días en una de las pantallas electrónicas gigantes de Times Square, en la ciudad de Nueva York, explicando el fundamento histórico y legal que apoya la incuestionable soberanía territorial de China y sus derechos en la región.

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    Si nos han de robar, 
    que sean otros y no los mismos de siempre

    Si como votantes, no nos escuchan
    como consumidores, lo harán
    boicoetemos sus empresas.
    Llevamos las de ganar. 

    Como acabar con la ESTAFA de las ELÉCTRICAS... de una puta vez pasando de los Vendepatrias del Bipartidismo

    Ante el robo continuo y escandaloso por parte de las eléctricas y sus abusos en el recibo de la luz
    propongo... 
    actuar todos unidos como consumidores
    contratando TODOS 
    o en su defecto una gran mayoría,
      otra compañia eléctrica que no sea ninguna de estas dos (ENDESA - IBERDROLA) y cambiarnos a otra cualquiera de las muchas ofertas que existen hoy en día.

    De tal forma que no les quede otra a las grandes que plegarse a nuestras demandas de una tarifa más justa y mucho más barata
    o atenerse a las consecuencias 
    de seguir con su estafa.

    En nuestra mano está que siga este robo o cortar por lo sano para que no nos sigan mangoneando

    ARMAK de ODELOT

    Canción del Indignado Global

    (solo pá Mentes preclaras 

    libres de Polvo y Cargas)

    Si me han de matar que sea,
     un Trump que de frente va

      no un Obama traicionero, 

    que me venga por detrás.


    Éstos del bipartidismo, 

    a nadie ya se la dan

    Tanto monta, monta tanto,

    ser sociata o liberal.


    Que harto me tienen sus cuentos, 

    de crisis y guerras sin más

    Cuando no hay bandera que tape, 

    la ansia de un criminal.


    Daños colaterales son, 

    inocentes masacrar

    si lo hiciéramos con ellos, 

    no habría ni una guerra más.


    Por eso pasa que pasa, 

    que nadie se alista ya

    a no ser que la CIA pague,
     
    como al ISIS del MOSAD


    A mí, que nunca me busquen, 

    ni me llamen pá luchar.

    Que yo no mato por nadie. 

    Yo mato por no matar.


    La paz de los cementerios 

    es la paz del capital

    Si soy rojo es porque quiero, 

    en vida, vivir en paz.


    Hoy tan solo mata el hambre, 

    del rico por tener más 

    Con el cómplice silencio, 

    de toítos los demás.


    Que preferimos taparnos, 

    los ojos pá no pensar

    O mirar pá otro lado, 

    pensando que el mal se irá.


    Creer que lo que a otro pasa, 

    no nos tiene que importar.

    Cá palo aguante su vela, 

    repetimos sin cesar.


    Éste es el mantra egoísta 

    que rula por la sociedad

    como si lo que le pase a otro, 

    no te pueda a tí pasar


    Más todo, cuán boomerang vuelve, 

    al sitio de donde partió

    y tal vez ocupes mañana, 

    el sitio que otro dejó.


    Mil pobres ceban a un rico, 

    otros mil le dan jornal,

    y otros cuantos dan su vida 

    porque todo siga igual. 


    Que no me coman la oreja, 

    que no me creo ya ná

    de sus guerras, sus estafas, 

    ni su calentamiento global


    Tan solo vuestras mentiras, 

    esconden una verdad

    que unos pocos están arriba 

    y abajo tós los demás.


    Da igual que seas ateo, 

    cristiano o musulmán.

    Solo los elegidos, 

    el paraíso verán.


    Hay medios alternativos, 

    amarillos muchos más.

    Unos más rojos que otros. 

    Los menos, de radikal.


    Más todos tienen su cosa, 

    y a todos hay que hojear

    Que comparando se tiene 

    opinión más general.


    Qué de tó aprende uno. 

    Nadie tiene la verdad.

    Ser más papista que el Papa, 

    no es garantía de ná.


    Solo creo en lo que veo, 

    díjome santo Tomás, 

    que el que a ciegas se conduce, 

    no para de tropezar.


    Y al enemigo, ni agua, 

    ni nunca contemporizar

    No dudes, tarde o temprano, 

    siempre te la jugará.


    No hay que seguir a nadie 

    y a todos hay que escuchar.

    Si tu conciencia te guía, 

    de nada te arrepentirás.


    Dá gusto ver a los ricos, 

    pegarse por serlo más

    mientras en eso se hallen, 

    quizás nos dejen en paz.


    Si te crees o no sus mentiras, 

    a ellos les dá igual.

    Con tomarlas por veraces, 

    les basta para actuar. 


    Que no me cuenten más cuentos, 

    que tós me los sé yo ya.

    Se demoniza a cualquiera

    que no se deje robar.



    No basta con ser un santo, 

    sino ser de"su santoral"

    Como la cojan contigo, 

    no te valdrá ni el rezar.


    Pensamiento único llaman. 

    Anteojeras pá no pensar

    más que en la zanahoria. 

    El palo irá por detrás.


    Si no crees en lo dictado, 

    anti-sistema serás

    Y por mucho bien que hagas, 

    te van a demonizar.


    Que no me coman la oreja, 

    que a mí, no me la dan.

    Que me sé todos sus cuentos 

    y también, cada final.


    Si de cañon, quieren carne, 

    pál matadero llevar

    que busquen a otro tonto, 

    que este tonto no va más



    No se ha visto en tóa la historia, 

    otra estafa sin igual.

    Que la madre tóas las crisis, 

    que creó el capital


    Y cuando tan ricamente, 

    uno estaba en su sofá

    Relajado y a cubierto, 

    de inclemencias y demás,


    te cortan sin previo aviso

    el grifo de tu maná. 


    Y te dejan sin tus sueños,
     
    sin trabajo y sin hogar


    y pá colmo y regodeo 

    de propios y extraños, van

    y te dicen como aviso

    que al rojo no hay que escuchar


    que son peores que el lobo,

    del cuento y mucho más

    y que si vas y los votas

    toíto te lo robarán.



    Si como votantes, no nos escuchan

    como consumidores lo harán.

    Boicoetemos sus empresas

    Llevamos las de ganar. 


    Si no queda más remedio

    que dejarnos de robar

    que sea otro y no el de siempre

    tal vez así, aprenderá


    No hay pan pá tanto chorizo,

    dicen, cuando lo que sobra es pan.

    Lo que no hay es un par de huevos
     
    pá que no nos choriceen más.


    Resultado de imagen de eladio fernandez refugiados suecia

    Ellos tienen de tó

    los demás, cuasi-de-ná

    mas ellos son cuatro mierdas

    y nosotros sémos más.


    La próxima revolución 

    contra las corporaciones será

    y si ésta no se gana 

    no habrá ninguna ya más.

    Quien sepa entender que entienda

    lo que digo es pá mascar

    despacio y con buena conciencia.

    Mi tiempo no dá... pá más


    Armak de Odelot


    Dicen: 

    No será televisada, 

    la próxima revolución.

    Más como nadie se fía 

    de lo que se nos dice hoy en día,

    pasamos los días enteros, 

    tumbados en el sofá

    delante la caja tonta,

     por no perder el momento
    del pase de la procesión 
    que tós llevamos por dentro