Los datos de los defensores de derechos indican que los policías “fueron asesinados en las tres últimas semanas” y precisan que ellos fueron fusilados o decapitados.
Se señala que la semana pasada fue descubierta una fosa común de 50 metros de ancho y 100 metros de largo ubicada a 30 kilómetros al sur de Mosul.
Previamente, se informó que los terroristas de Daesh secuestraron a 295 antiguos miembros de los servicios de seguridad iraquíes y trasladaron por la fuerza a 1.500 familias de la ciudad de Hammam Al Alil a Mosul.
El pasado 17 de octubre comenzó una operación militar a gran escala para reconquistar Mosul, que desde junio de 2014 permanece bajo control de Daesh, autodenominado Estado Islámico, proscrito en varios países, incluida Rusia.
En la ofensiva participan, según los medios, unos 30.000 militares iraquíes y las milicias kurdas de los peshmerga, a los que apoya desde el aire una coalición de más de 60 países liderada por EEUU.