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sábado, 2 de diciembre de 2017

Decretado el Toque de Queda en Honduras ante Protestas por Fraude en las Elecciones Generales

Decretado el toque de queda en Honduras ante las protestas por un presunto fraude en las elecciones generales

El Gobierno de Honduras decrretó el estado de excepción para frenar las protestas por un presunto fraude en las elecciones generales, mientras el recuento de votos para definir al nuevo presidente se alargó por la ausencia de la oposición en un proceso especial de escrutinio.
El Gobierno de Juan Orlando Hernández, quien aspira a la reelección y aventaja provisionalmente en el recuento de votos al candidato opositor, Salvador Nasralla, puso en vigor la suspensión de garantías desde las 23:00 hora local del viernes (05:00 GMT del sábado) y durante 10 días.
Durante la vigencia del decreto queda prohibida la "libre circulación" entre las "6 de la tarde y las 6 de la mañana en todo o parte del territorio nacional", aunque de esto se exceptúan a los miembros y todo el personal del Tribunal Supremo Electoral (TSE), los representantes de los partidos políticos, observadores y periodistas acreditados por el organismo de comicios.
También a los trabajadores del transporte de carga, de los entes de socorro personal médico y de enfermería y los miembros del cuerpo de seguridad y de justicia, además de diplomáticos.
La medida se decretó cuando en las calles de las principales ciudades de Honduras seguían este viernes las protestas que comenzaron el miércoles, cuando Hernández pasó a encabezar las votaciones que, escrutadas el 94,35 % de mesas, le daban 42,92 % frente al 41,42 % de Nasralla.
Al menos un muerto, manifestantes y agentes de las fuerzas del orden heridos, daños en edificios públicos y privados, el saqueos de negocios, paralización parcial del tráfico urbano, destrozos a monumentos e incendios se han registrado en el país, unos hechos que han sido repudiados por algunos sectores que consideran que las protestas han pasado de lo político al vandalismo.
La oposición acusó a infiltrados de los actos de protesta y Nasralla dijo que los responsables de las manifestaciones callejeras "tiene nombres y apellidos", el presidente  Hernández  y los magistrados del TSE Matamoros y Saúl Escobar, quienes estarían propiciando la presunta trampa en su contra.
En ese ambiente de crispación y antes del anuncio del estado de excepción, el presidente del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), David Matamoros, dijo en una rueda de prensa que esperan comenzar este sábado el recuento de un millar de actas con inconsistencias y en las están los votos que definirían al nuevo presidente del país.
Las propias autoridades de comicios habían anunciado que esperaban iniciar y terminar este mismo viernes ese recuento, pero el proceso nunca comenzó porque los representantes de Nasralla no se presentaron.
Matamoros agregó que la Alianza de Oposición también hizo nuevas solicitudes en cuanto a asuntos de informática y electorales, entre ellas que el TSE que le entregue el listado completo de las actas que van a observación o escrutinio especial, y de las 5.174 actas que se escanearon en las oficinas del organismo en su centro de acopio en Tegucigalpa.

Llamamiento a la comunidad internacional

En un mensaje en Facebook, Nasralla aseguró el viernes que hay un acuerdo con la Organización de Estados Americanos (OEA) y la Unión Europea "para que las 5.174 actas que no se transmitieron por internet sean revisadas una por una".
El mismo viernes Hernández, en un audio difundido por medios locales, instó a sus compatriotas a esperar "con paciencia y prudencia", y "con ganas", los resultados del organismo.
"Vamos avanzando bien en el proceso, mantengámonos focalizados en esperar el resultado esta tarde o noche, recuerden que yo me comprometí (...) a que íbamos hacer de este proceso electoral un proceso con respeto, íbamos a llamar a la calma, la serenidad y a respetar el resultado de la suma de todas las actas", añadió.
También fue reiterado este viernes el llamamiento de observadores nacionales e internacionales, iglesias, empresa privada, organizaciones de sociedad y no gubernamentales, entre otras, a la calma, a esperar los resultados y que cesen las protestas.
En las votaciones del 26 de noviembre Honduras se eligieron un presidente, tres vicepresidentes, 128 diputados para el Parlamento local, 20 para el Centroamericano y 298 alcaldías municipales.
Los resultados generales se conocerán antes de Navidad, si en su lentitud el organismo electoral no dice lo contrario. 

Honduras impone un toque de queda tras protestas electorales

El gobierno de Honduras impuso el viernes por la noche un toque de queda y suspendió varias libertades individuales tras las protestas y disturbios de los últimos días. 
La tensión crece en el país por la demora en el conteo de los votos tras unas elecciones presidenciales en las que los dos candidatos se han declarado vencedores.
La máxima autoridad electoral del país anunció que ya ha contabilizado casi el 95% de los votos de los comicios del domingo y que contará a mano las papeletas de 1.031 actas que presentaban “inconsistencias”.
El presidente, Juan Orlando Hernández, quien busca la reelección, mantenía la ventaja con más de 46.000 votos sobre el opositor Salvador Nasralla. No estaba claro si el conteo manual podría modificar la tendencia a favor del mandatario.
Mientras esperan los resultados definitivos de las elecciones, cientos de manifestantes han salido a las calles y se han enfrentado con policías, que han intentado dispersarlos con gas lacrimógeno y chorros de agua.
Doce personas resultaron lesionadas en enfrentamientos callejeros entre policías y manifestantes, según Jair Meza, vocero de la Policía Nacional, y varios negocios sufrieron daños tanto en la capital como en San Pedro Sula.
Varios grupos mantenían cortadas carreteras con neumáticos incendiados y otros objetos, forzando a algunos padres a cargar a sus hijos a través de las barricadas humeantes.
Miguel Osorio, portavoz del Hospital Escuela Universitario de Tegucigalpa, dijo el viernes que han atendido a 10 heridos de bala desde que iniciaron las protestas, cuatro de los cuales ya fueron dados de alta.
El jefe del Gabinete de Gobierno, Jorge Hernández, enumeró en un mensaje emitido por radio y televisión las medidas del toque de queda.
El gobierno prohibió la libre circulación de las personas de las 6 de la tarde a las 6 de la mañana en todo el territorio nacional, con excepciones como trabajadores de emergencias, observadores nacionales e internacionales y transporte de carga, entre otros.
“El toque de queda es para salvaguardar la seguridad del país”, indicó el presidente a su salida de un hotel donde se reunió con observadores internacionales. 
“Este es el momento que el pueblo se sienta respaldado por sus fuerzas armadas y su policía, porque no es posible que alguien se dedique a saquear o a robar”.
La medida establece que las Fuerzas Armadas apoyarán conjunta o separadamente, cuando la situación lo requiera, a la Policía Nacional para mantener el orden y la seguridad y garantizar el ejercicio de los derechos democráticos de la población.
Las autoridades podrán detener a toda persona que se encuentre circulando fuera del horario indicado y a los sospechosos de causar daños a personas y bienes, así como de asociarse para cometer hechos delictivos.
Hernández informó que las autoridades instalarán retenes policiales y militares en diferentes puntos del país para hacer cumplir las disposiciones gubernamentales y desalojarán las instalaciones públicas, carreteras y puentes que ocupadas por manifestantes.
David Matamoros, presidente del tribunal electoral, había indicado tras reunirse con representantes de la oposición que cada partido debía acreditar a 60 personas para que participaran en el conteo de la tarde junto a observadores internacionales, y estimaba que esto podría tomar seis horas.
Posteriormente, el funcionario anunció que el conteo de los votos se reanudaría a las 9 de la mañana del sábado.
“Honduras requiere paz y esperamos concluir el proceso este sábado”, añadió, e indicó que falta revisar 1.006 actas que presentan irregularidades.
Y, a petición de Nasralla, se han incluido en la tarea otras 5.550 actas de los comicios del domingo con el fin de analizarlas detenidamente.
“Eso lo haremos mañana. Esperamos proclamar con transparencia quién es el nuevo presidente de Honduras”, afirmó Matamoros.
Por su parte, la oposición publicó una lista de demandas que incluía una revisión más amplia de votos en tres jurisdicciones donde se alega que hubo inconsistencias.
La corte rechazó en un comunicado cualquier sugerencia de irregularidades y lamentó la violencia creciente en las calles.
Heide Fulton, encargada de negocios de la embajada estadounidense en Honduras, escribió el viernes en su cuenta de Twitter que este país centroamericano había iniciado una fase sin precedentes en el proceso electoral. También llamó a la calma durante el conteo.
Mey Hung, gerente de Walmart de México y Centroamérica y presidenta de la Cámara de Comercio Hondureño-Americana, lamentó la situación post-electoral.
“Esta crisis política se ha convertido en escenario de vandalismo”, dijo en rueda de prensa.
Tanto Nasralla como Hernández se han declarado ganadores de la elección y sus respectivos partidos han llamado a sus seguidores a defender los votos en las calles, aunque en las últimas horas también les han pedido no realizar actos violentos.

El general retirado Romeo Vásquez, quien encabezó el golpe de Estado contra el ex presidente Manuel Zelaya en 2009, culpó de lo que pasa en las calles al retraso del tribunal en dar los resultados definitivos.
“El tribunal electoral no está haciendo las cosas correctamente y las cosas se le fueron de las manos”, dijo Vásquez en la estación radial local América. “La gente cree que hay fraude porque el tribunal no dio a conocer los resultados de los comicios de inmediato”.


Golpe a Nasralla en Honduras


El 28 de junio del año 2009, cuando Honduras iniciaba un camino propio, alejada del neoliberalismo y se hermanaba con el progresismo latinoamericano que emergía en Suramérica, el presidente Manuel Zelaya sufre un golpe de Estado. 

Un golpe de Estado ordenado desde Estados Unidos y ejecutado por la oligarquía, tal como sucedió en Paraguay y en Brasil; llevados a cabo por el Congreso y la Corte Suprema de Justicia.
Buitres afines al poder del capital, dictaduras que se imponen con nuevos modelos operacionales, que tienen el centro de la logística en el Congreso, en la Corte Suprema de Justicia y en el Tribunal Supremo Electoral y; que son manipuladas por los medios de comunicación corporativos que son base para mantener vigente el sistema actual, engañando a la población.
Honduras, ubicado en el triángulo norte de Centroamérica, tal como Guatemala y El Salvador, es uno de los tres países más explotados de Latinoamérica, en las últimas décadas. 

El negocio de las multinacionales ha realizado ecocidios que han terminado con pueblos enteros. Comunidades que se ven obligadas a emigrar de forma irregular hacia Estados Unidos porque el país los obliga.  

En Honduras, las muertes de defensores de Derechos Humanos y del medio ambiente, se igualan a las de Colombia. Las cifras de los feminicidios son abrumantes.
País base en el tráfico de droga desde Colombia hasta Estados Unidos, y nos han contado el cuento al revés, cuando nos dicen que Estados Unidos firmó un convenio para la erradicación de la misma en el triángulo norte de Centroamérica con el Plan Alianza para la Prosperidad: no, esto lo único que busca es militarizar la zona y dejarla al mando de las clicas criminales del gobierno, para dar paso al tráfico de droga, de personas y a la explotación minera; desapareciendo y asesinando a cuanta persona se ponga en contra, tal como sucede en Colombia con el Plan Colombia y en México con el Plan Mérida y el Plan Frontera Sur.
Y entonces entra al ataque la mediatización acusando de estas muertes a las maras, cuando es violencia institucional, y manipulan a la población que angustiada y sin entender nada pide la pena de muerte para los parias. 

Y se sube el telón y se baja el telón y se lleva a cabo la obra de teatro que mantiene lejos a la población de las transacciones del gobierno, el ejército y la oligarquía. 

Y poniendo como excusa la violencia de las maras y del tráfico de drogas, crean bases militares estadounidenses en territorio latinoamericano, con la única finalidad de cercar a quienes en amor patrio buscan liberar a su tierra de toda opresión. 

Y así nos han convertido en colonias estadounidenses, vencidas e indefensas.
Honduras, Guatemala y El Salvador, después de México, son los países que más exportan mano de obra barata a Estados Unidos, poblaciones enteras se ven obligadas a emigrar: por la violencia, por falta de oportunidades y porque buscan salvar sus vidas y desarrollarse. Migración que realizan sin documentos y que las convierte en presas fáciles para el crimen organizado.
En Guatemala la destitución de Pérez Molina tuvo como resultado la elección de otro capo llamado Jimmy Morales, la población votó a favor de otro verdugo. 

Solo sirvió de espectáculo para la prensa internacional y de excusa para que quienes en realidad controlan la zona, cambiaran a un títere y pusieran a otro.  

En Honduras las cosas están siendo distintas, la población votó a favor de Salvador Nasralla y debe defender ese voto, saliendo a las calles y exigiendo que se respete su decisión.
No se puede dejar robar su soberanía, el pueblo hondureño debe defender ese voto y no permitir otro golpe como el de Zelaya. 

Hay mucho en juego, el pueblo hondureño no puede dejarse vencer, ya trazó un camino, debe seguirlo, es el camino del progreso.
Hace dos años, Honduras se llenaba de indignados manifestando con antorchas, la larga noche hondureña se llenaba de luz, de resistencia, de pueblo despierto, de utopías y albedrío.
No deben dejarse vencer, el pueblo hondureño tiene la fuerza, la dignidad, la entereza y el amor para resistir y no permitir que buitres afines a la explotación, a la manipulación y al exterminio, sean quienes los gobiernen.
Deben demostrarle al gobierno actual, que su tiempo terminó, que Honduras despertó y van a defender su derecho constitucional a como dé lugar. Por los que ya no están, por los que están y por los que vienen. Es ahora, el tiempo es hoy.
Blog de la autora: 
Ilka Oliva Corado. @ilkaolivacorado contacto@cronicasdeunainquilina.com
30 de noviembre de 2017, Estados Unidos.


IU se suma a las múltiples denuncias por el “nuevo fraude electoral perpetrado en Honduras” y “condena” la represión ordenada por Juan Orlando Hernández contra las protestas populares


Viernes, 1 de diciembre 2017. 
Izquierda Unida se suma a los movimientos sociales y partidos democráticos que están denunciando a nivel internacional un “nuevo y descarado fraude electoral en Honduras, perpetrado esta vez por el Tribunal Nacional Electoral (TNT), el mismo órgano que debería salvaguardar la transparencia de unos resultados justos en la jornada electoral”, según explica Francisco Pérez, responsable federal de Extensión Internacional.
El dirigente federal de IU detalla que “tras un recuento inacabable que inexplicablemente duró tres días hasta garantizar el amaño, la consulta ha terminado en un escandaloso fraude electoral, con denuncias contrastadas de compra de votos, la presentación de cientos de actas falsas sin firmas de delegados de mesa o manipulaciones en el conteo electrónico”.
Pérez indica que “nuestra formación ha recabado datos de fuerzas locales que indican que en el largo proceso poselectoral no se garantizó ni siquiera el recuento de la totalidad de las actas electorales”. 
Esto ha llevado, entre otras graves irregularidades, a que después de que el propio TNT anunciara repetidamente la victoria del candidato opositor, Salvador Nasralla, en los parciales de recuento, finalmente se decretara el triunfo por la mínima del candidato de la derecha golpista hondureña, Juan Orlando Hernández. Ello derivó en fuertes protestas reprimidas duramente hasta producir decenas de heridos.
A toda esta situación se le ha sumado la denuncia pública y escrita hecha por el ex presidente Manuel Zelaya sobre la caída del sistema informático, explicada con el argumento de que ‘se les llenó el disco duro’ y sin ningún tipo de notificación a los partidos en contienda.
Ante todos estos hechos, Izquierda Unida expresa a través de su Comisión Internacional “todo nuestro apoyo y solidaridad con el pueblo hondureño, así como con la denominada Alianza Opositora contra el golpe de Estado, al tiempo que denunciamos la dura represión perpetrada por las fuerzas policiales y militares a las órdenes de Juan Orlando Hernández”.
IU tacha de “intolerable y antidemocrático” este nuevo fraude, que debería ser condenado por la comunidad internacional. Esta es la tercera violación de la voluntad popular en Honduras desde el golpe cívico militar que despojó en 2009 de la presidencia democrática del país a Manuel Zelaya. Tras ese golpe fueron convocadas unas elecciones fraudulentas, organizadas por los propios golpistas, ganadas de forma fraudulenta por el también miembro del Partido Nacional, Pepe Lobo, que hoy está acusado por la Fiscalía de EE.UU de proteger a narcotraficantes a cambio de sobornos. Su hijo Fabio ya se encuentra preso en EEUU desde 2015. La campaña electoral de Hernández también ha recibido denuncias de haber recibido fondos procedentes del narcotráfico.
Honduras es el segundo país más pobre de América Latina, donde la desigualdad, la pobreza, la corrupción, el narcotráfico y el crimen organizado han crecido de forma imparable tras el fin del gobierno de Manuel Zelaya. El país está en manos de una oligarquía corrupta que ha entregado lo mejor de sus recursos naturales a las transnacionales extranjeras.

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