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miércoles, 27 de septiembre de 2017

El Referéndum sobre la Independencia del Kurdistán está dirigido por Israel y EEUU contra Teherán, Bagdad y Damasco.

El referéndum sobre la independencia del Kurdistán iraquí, es dirigido contra Teherán, Bagdad y Damasco


Apenas se encuentran las fuerzas iraquíes y sirias cercanas a eliminar a DAESH (EI) tanto en Iraq como en Siria, el líder kurdo iraquí Massoud Barzani anuncia su intención de celebrar un referéndum sobre la independencia de la región del Kurdistán de Iraq.

Abundan las especulaciones sobre los motivos de ese anuncio, algunos lo vinculan con el anhelo histórico de los kurdos de establecer su estado nacional, y otros lo han atribuido a los problemas que enfrenta Barzani y su hijo en la provincia después de la caída de los precios del petróleo y el estallido de la crisis económica, lo cual vuelve a llamar la atención sobre las acusaciones formuladas en su contra relacionadas con el hecho de administrar la región como si fuera un feudo personal, además de confiscar los ingresos del petróleo y depositarlos en bancos turcos.

UNA SINCRONIZACIÓN SOSPECHOSA

El referéndum llega en un momento en que las fuerzas sirias e iraquíes se encuentran próximas a eliminar a DAESH.

Lo mencionado anteriormente puede resumir algunas de las motivaciones, pero lo que suscita dudas, es el momento escogido por Barzani para anunciar la celebración del referéndum ante la oposición de todos los países vecinos de Iraq, es decir, Siria, Irán y Turquía, sumado esto a la oposición del gobierno iraquí que rechaza esta acción unilateral; asimismo, se propone el referéndum en un momento en que las fuerzas sirias e iraquíes se encuentran próximas a eliminar a DAESH y restablecer la comunicación territorial entre los dos países por primera vez desde el año 2014.

Cabe señalar que DAESH se había desplegado sorpresivamente en el occidente de Iraq y el oriente sirio lo cual interrumpió la continuidad territorial, en tiempos en los que el presidente sirio Bashar al Assad se encontraba a punto de recuperar el control del estado sirio sobre la totalidad de la nación y en momentos en el que el ex primer ministro iraquí Nouri al Maliki había obligado a las fuerzas estadounidenses a retirarse de Iraq; en ese entonces se produce el despliegue de DAESH con el fin de detener los éxitos sirios e iraquíes e impedir la conexión geográfica entre ambas partes; y ahora, se produce el anuncio de Barzani sobre el referéndum, así como se incrementa la extensión del territorio controlado por el partido kurdo Siria Democrática en el noreste del Éufrates, amenazando con imponer nuevamente una separación entre Iraq y Siria.


EL PAPEL ESTADOUNIDENSE
Las relaciones entre el líder kurdo y Washington son muy cercanas.

Aquí debemos preguntarnos sobre el papel estadounidense en la acción tomada por Barzani, sobre todo porque las relaciones entre el líder kurdo y Washington son muy cercanas, en momentos en que las fuerzas estadounidenses apoyan al partido Siria Democrática y lo ayudan a establecer bases en el este de Siria.

Es importante señalar, que fue Estados Unidos quien provocó el caos, apoyándolo y aprovechándolo en Iraq y Siria, en el marco de una estrategia más amplia para impedir la expansión de las fuerzas eurasiáticas (China, Rusia e Irán) hacia el Mediterráneo oriental.

Washington considera que estas potencias desafían su hegemonía global y le cierran el paso hacia el territorio eurasiático; por lo tanto, ha elaborado una estrategia de contención para impedir su acceso a las rutas marítimas y, por lo tanto, al comercio internacional; esto explica las crisis en el Báltico, Ucrania, el Levante, Yemen, Somalia, el Mar de China Meridional y el Mar Amarillo; así como explica por qué Estados Unidos ocupó Iraq en 2003 después de Afganistán, y por qué trató de derrocar a Siria, cuyo liderazgo se había negado a cortar sus lazos con Irán y Rusia.

EL BLOQUEO DEL EJE DE TEHERÁN - BAGDAD - DAMASCO

Es evidente que, está en el interés de los Estados Unidos separar a Siria de Iraq para convertir a este último en una barrera entre Siria e Irán; pero el ex primer ministro Al Maliki enfrentó esta estrategia ofreciendo apoyo a Siria en su enfrentamiento con los grupos armados respaldados por Estados Unidos y sus aliados; y cuando parecía que Siria estaba a punto de vencer en 2014, el peligro de formar una alianza entre Teherán, Bagdad y Damasco volvió a aflorar, amenazando la estrategia estadounidense; y cuando DAESH se había desplegado en el occidente de Iraq y el este de Siria, esto ayudó a Washington a bloquear la formación de la alianza; pero recientemente y con el avance de los dos ejércitos el sirio y el iraquí, reapareció el peligro de formar una alianza entre Irán, Iraq y Siria; de ahí la decisión de Barzani de anunciar un referéndum sobre la independencia.

Queda por ver los efectos de este referéndum y si conducirá hacia una independencia a la luz de la oposición de todos los países vecinos.

http://espanol.almayadeen.net/articles/main/13760/el-referéndum-sobre-la-independencia-del-kurdistán-iraquí--e

¿Por qué EEUU (no) se opone al referéndum de independencia de Kurdistán?

Del mismo modo que la RAK nació por la voluntad de EEUU y como una recompensa a los dirigentes derechistas y feudales kurdos por su colaboración durante la agresión militar dirigida por George Walker Bush al resto del pueblo iraquí en 1991, su independencia también dependerá, no de su pueblo, sino de los intereses y la voluntad de la Casa Blanca.


Durante las semanas pasadas, el Secretario de Defensa de EEUU, Jim Mattis, el jefe del Comando Central de EEUU, general Joseph L. Votel, y otros militares han visitado la RAK, exigiendo al presidente Massoud Barzani aplazar el referéndum para dentro de tres años. 
Aunque EEUU afirma que así pretende mantener la unidad de todos los iraquíes en su guerra contra ISIS, sus propósitos reales son otras:
–Consolidar el gobierno de Bagdad dirigido por el chiita árabe Haider al-Abadi, el hombre de EEUU y de Arabia Saudi, de cara a las elecciones parlamentarias previstas para el próximo año, y neutralizar los intentos de Irán en forjar sus lazos con los diversos partidos iraquíes, incluidos los kurdos. 
Washington al aplazar la salida de Kurdistán, que mayoritariamente es sunnita, evita que aumente el peso de las fuerzas chiitas pro-iraníes en Irak, cuyo régimen administra la segunda reserva mundial del petróleo. 
Necesita que al-Abadi renueve el mandato, aunque, en realidad, los chiitas árabes prefieren que los kurdos se marchen, siempre y cuando no se lleven consigo la ciudad de Kirkuk, multiétnica, estratégica y empapada del Oro Negro.
-Ganar más tiempo para fortalecer las estructuras políticas kurdas necesarias para crear un Estado propio
Los conflictos entre los partidos kurdos (que son más de corte familiar-tribal que político) han llagado a tal punto que Barzani suspendió en 2015 el parlamento y sólo lo volvió a reunir la semana pasada para que legitimase el referéndum. 
La guerra civil de los años noventa dejaron a miles de muertos en esta región: El enemigo de la independencia kurda no sólo es la élite gobernante de Bagdad, Ankara, Teherán o de Washington, también lo es la burguesía corrupta y autoritaria.
-Buscar una solución al problema de falta de autonomía económica de Kurdistán, que carece de infraestructuras capaces de gestionar la independencia: 
al no tener salida al mar, sólo podrá vender su petróleo pasando los oleoductos por Irán, Turquía o Irak. 
Además, la caída del precio del petróleo, un monumental saqueo de las arcas públicas (la desaparición de 1.107 millones de dólares en 2016) y la aplicación de políticas neoliberales han provocado una profunda crisis económica en el GAK.
-Disuadir a Turquía que puede aprovechar la formación del estado kurdo, y darse el derecho de apropiarse de las tierras kurdas de Siria. 
Además, preocupa a EEUU que los kurdos de esta socia de la OTAN -que sufren una creciente represión-, intensifiquen su lucha contra el régimen autoritario de Erdogan, desestabilizando este estratégico país euroasiático.
-Alargar el proceso hasta que hubiese cambios en Irán y Turquía. 
EEUU está tomando muy en serio las insinuaciones de ambos países en intervenir militarmente en la autonomía si el GAK llega a declarar la independencia.
En general, los costos de un Estado Kurdistán son mayores para Washington que los beneficios: 
un estado kurdo no es viable, por lo que su prioridad es proteger las cinco bases militares que ha construido en Kurdistán (la ultima en el distrito de Zummar, a 60 kilómetros al noroeste de Mosul, con el fin de controlar desde la orilla occidental del río Tigris hasta unos kilómetros de Mosul) e impedir que choque con los países vecinos y perder la estabilidad y el estatus que tiene actualmente.
Las quejas de la autonomía
Liberarse de los interminables conflictos religiosos de la zona árabe de Irak en los que se ha visto envuelto es uno de las principales razones presentadas por el GAK para demandar el divorcio a Bagdad, consciente de que sus vecinos árabes, turcos e iraníes le declararían la guerra.
El GAK le acusa a Bagdad de incumplir la Constitución del 2005 que exige un acuerdo sobre la disputada ciudad de Kirkuk, del impago del 17% del presupuesto general del estado, de marginar a los kurdos en las instituciones gubernamentales, de no equipar a su ejército Peshmargas, y bloquearle el suministro de armas extranjeras. 
Por lo que ha dado por fracasado el federalismo iraquí.
¿Qué pasará?
En realidad, el objetivo de Barezani al convocar el referéndum (que aún puede ser desconvocado) no es la independencia a corto plazo sino:
-Forzar a Bagdad a iniciar el proceso de la independencia para un futuro indeterminado. 
De hecho Francia, EEUU y la ONU ya están diseñando planes para salvar la cara de Barezani, trabajando con Bagdad para que acepte la negociación de la separación de Kurdistán en los próximos años, pero con garantías internacionales sobre las fronteras del nuevo estado y mientras las tropas kurdas permanezcan en Kirkuk. 
Sabe que el hecho de que el referéndum no incluya las importantes zonas en disputa con Bagdad, estas se quedaran fuera de su dominio quizás para siempre. 
Por lo que preferirá congelarlo de momento.
Desviar la atención de sus ciudadanos de la incapacidad de su “familia” (en el sentido don coleonilista del término) de gobernar sobre cinco millones de personas (la mitad, jóvenes nacidos en la autonomía que no se consideran iraquíes) cuyas expectativas de una vida mejor no se han cumplido después de 26 años de gozar de semi-independencia de la región. 
Cerca de 70.000 kurdos viven en la pobreza, y el gobierno no sube los salarios según la inflación y encarcela y tortura a los detenidos. Un etnocentrismo insolidario y con aires de superioridad es incapaz de entender la lucha de clases.
Y ¿cómo no? la ambición de querer ser “cabeza de ratón, que no la cola de león”.
La lucha actual de los kurdos iraquíes no es una romántica batalla por la liberación nacional: no puede conseguirlo si su único apoyo es Israel que niega este derecho a los palestinos. 
Los que dirigen este escenario no buscan una solución sensata a la cuestión kurda, sino utilizarla.
Washington avanza en su Proyecto de Nuevo Oriente Próximo, que incluye romper estados poderosos de la zona y convertirlos en mini estados y si no lo consigue los dejará como “estados fallidos” para poder controlarlos y ocuparlos militarmente. 
Aquí, los kurdos no son jugadores de su propio destino, sino peones de los intereses de otros. 
Lamentablemente, hace décadas que el derecho de autodeterminación de los pueblos se ha convertido en el derecho exclusivo de un solo estado con derecho al veto del Consejo de Seguridad de la ONU, aunque haya sido por la mayoría absoluta de los estados del mundo: 
El 31 de diciembre del 2014, EEUU vetó en el Consejo de la Seguridad de la ONU el reconocimiento de Palestino como Estado, a pesar de la gran aprobación de la Asamblea general. 
Salvo Rusia que voto en positivo otros miembros del Consejo se abstuvieron, mientras votaron en favor de romper a Sudan, convirtiéndole en el ultimo estado reconocido del mundo.

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