Páginas

viernes, 27 de enero de 2017

Peña se queja del Muro de Trump... mientras construye el suyo entre México y Guatemala

Photo published for El muro de Trump ¿Crisis u oportunidad?

Peña se queja del muro de Trump y, mientras tanto, construye el suyo entre México y Guatemala


La empresa Ferrosur y el Gobierno del municipio de Tierra Blanca, en el estado de Veracruz, construyen desde hace poco más de dos años una tapia de tres metros para evitar que migrantes centroamericanos aborden el tren popularmente conocido como ‘La Bestia’.
Si bien en 2014 comenzó a ser construido el muro con ladrillos de concreto con un resorte de púas en la parte superior, ahora la población no sabe qué alcances puede tener la ampliación de esta muralla construida a lo largo de las vías del tren que cruzan casi todo Tierra Blanca.
Diversos medios locales informaron que, desde que fue erigido, el muro no solo impidió a los migrantes subir al tren que los lleva a Estados Unidos, sino acudir al albergue Decanal Guadalupano, donde se les da orientación y cobijo.
El sitio SinEmbargo publicó en ese entonces que la tapia es parte del plan Frontera Sur del Gobierno federal, una política de Estado que pretende ordenar el cruce de migrantes por México.
“Nadie sabe a ciencia cierta quién dio el permiso. Se dice que fue el presidente municipal anterior; que ni siquiera pidieron permiso porque es derecho de vía; otros dicen que la barda cruzará toda Tierra Blanca, y otros más que solamente pasará por un tramo de las vías”, afirmó un vecino de Tierra Blanca al medio local Imagen del Golfo al comenzar el proyecto.
La inminente ampliación de la barda afectaría a familias de doce colonias de Tierra Blanca que no podrían pasar para ir a sus trabajos. Los habitantes quedarían prácticamente encerrados.

 – Diario Octubre




La empresa Ferrocarril del Sureste, propiedad de Grupo México, instaló una barda de concreto antinmigrantes. Foto: Cuartoscuro.

Pueblo de Veracruz levanta un muro contra migrantes… con ayuda de Grupo México

Ciudad de México, 18 de septiembre (SinEmbargo).– Como parte del plan Frontera Sur, implementado por el gobierno federal para contener el flujo de migrantes en el país, la empresa Ferrocarril del Sureste (Ferrosur), que es propiedad del consorcio Grupo México, instaló una barda de concreto en Tierra Blanca, Veracruz, que impide el paso a las vías por donde circula “La Bestia”.
La construcción de más de metro y medio de alto de ladrillos de concreto, tiene también un resorte de púas en la parte superior y resguarda las vías del tren por más de un kilómetro de distancia, dentro del municipio de Tierra Blanca, municipio donde arriban dos trenes de Ferrosur cada día, describe la prensa local.
La empresa, propiedad del multimillonario Germán Larrea Mota Velasco, opera actualmente líneas en 2 mil 093 kilómetros entre el Ferrocarril de Oaxaca, el Ferrocarril del Sur y el Ferrocarril Transístmico, entre otros.
Es, como la Minera Buenavista, causante del derrame de más de 40 mil litros de tóxicos a los ríos Sonora y Bacanuchi, considerado el mayor desastre ambiental en la historia de esa industria en México, una de las subsidiarias que componen el consorcio de Mota Velasco, compuesto además por compañías constructoras, fondos inmobiliarios, bancos, cines, etcétera.
Ese muro que, se tiene planeado será aún más largo, imposibilita a los migrantes a refugiarse en el Albergue Decanal Guadalupano, un grupo católico de la comunidad de Tierra Blanca, que abrió en 2003 y cuyo objetivo es brindar atención humanitaria gratuita, orientación sobre derechos humanos y protección a migrantes en tránsito.
INTERESES DE FERROSUR
De acuerdo con los encargados del lugar, en los últimos cinco meses sólo han recibido un 10 por ciento de las decenas que solicitaban techo y comida por unas horas.
“Esto no es algo nuevo, ya se veía venir, pero obedece a los intereses de Ferrosur. Ahorita, mujeres y niños no están llegando porque como los corretean, ya es más difícil, deben viajar por puntos ciegos, se arriesgan más”, contó una empleada del albergue a medios de comunicación veracruzanos.
El pasado 7 de julio, el Presidente Enrique Peña Nieto implementó el Programa Frontera Sur, cuyo objetivo, dijo, es proteger los derechos humanos de los migrantes que transitan por México y ordenar los cruces internacionales para que el paso sea más ordenado y seguro.

Al poner en marcha el programa, con el mandatario guatemalteco, Otto Pérez Molina, expuso que el proyecto conlleva cinco líneas de acción: un paso formal fronterizo, ordenamiento seguro, protección y acción social en favor de los migrantes, corresponsabilidad regional y coordinación interinstitucional.

México se inspira en Donald Trump y quiere construir un muro en las fronteras sur con Guatemala y Belice


Reproducido.- En el sureste de México tiene dos fronteras: una con Guatemala y la otra con Belice que no le arrojan ningún beneficio, por el contrario, sólo problemas le ocasionan porque esos cruces son utilizados para una nueva invasión: la de los centroamericanos que utilizan nuestro país para cruzar a Estados Unidos.
Si sólo el tráfico de indocumentados, principalmente guatemaltecos, salvadoreños y hondureños fuera el problema, eso sería lo de menos, pero se da el caso que una vez que los oficiales de Migración los detectan en territorio estadounidense los deportan de inmediato, y no a sus lugares de origen como está establecido en convenios internacionales, sino que lo hacen por la frontera mexicana, principalmente a Reynosa.
Esta situación genera en ciudades fronterizas como la nuestra, una serie de problemas porque es bien sabido que el gobierno mexicano no los va a enviar a sus lugares de origen por carecer de recursos para ello, eso, sin tomar en cuenta que la mayor parte de los deportados prefieren quedarse aquí para volver a intentar ir en busca del llamado “sueño americano”.
Si bien es cierto que en la ciudad hay albergues en donde se da hospedaje y comida a los migrantes, esto es solo por tres días por lo que muy pronto se ven por las calles de las diferentes colonias de Reynosa solicitando ayuda económica para comer, o como ellos dicen, para regresar a sus lugares de origen.
Muchos de estos inmigrantes al no encontrar una manera honesta de ganarse la vida se dedican a delinquir recurriendo al asalto, al secuestro y a la extorsión, y en el peor de los casos, integrándose a los grupos delincuenciales del crimen organizado.
El presidente de EEUU Donald Trump ha ordenado que se construya un muro a lo largo de la frontera que une a su país con México. 
El lado oscuro de la propuesta estriba en que pretende que ese muro lo pague el gobierno mexicano y que sea dentro de nuestro territorio, lo que significaría el arrebato de otra porción de tierra como cuando se quedaron con Texas, California, Nuevo México y Arizona, y además se quedarían con El Chamizal y el río Bravo cuya agua es propiedad de los dos países y sirve para el abasto del vital líquido a la mayoría de los fronterizos.
El republicano fundamenta su propuesta afirmando que por México están cruzando delincuentes y violadores que ponen en peligro la seguridad de su país.
La idea de Trump es buena, pero más que construir el muro en la frontera norte de México que se haga en la frontera sur sureste para frenar el paso de centroamericanos a ambos países.
En la frontera mexicana se acabó la paz y la tranquilidad y en ello han influido mucho los centroamericanos que una vez que son deportados por el gobierno de Estados Unidos, amparados con documentos falsificados se quedan en territorio mexicano.
Fuente: El Mañana

No hay comentarios:

Publicar un comentario