Tal y como encontramos en un artículo en RT, los analistas del Grupo Goldman Sachs, sugieren a los inversores que apuesten por las divisas de los países BRICS con la única excepción del yuan chino, puesto que según sus previsiones, las economías del este de Asia serán las más vulnerables al proteccionismo de Donald Trump.
En cuanto a la moneda china, Goldman Sachs espera un agobiante descenso este año, similar al que experimentó en el 2016 y los expertos de la entidad prevén que el tipo de cambio del yuan puede llegar a 7,3 por dólar estadounidense al final de este año.
China, Corea del Sur y otras economías del este de Asia son las más vulnerables a la política económica proteccionista del presidente electo de EEUU, Donald Trump, destacan los analistas de la influyente entidad financiera con sede en Manhattan.
En este sentido, Brasil, Rusia, la India y Sudáfrica corren menos riesgos, según los analistas de Goldman Sachs, debido a cuatro argumentos principales: en los mercados de estos cuatro países está mejorando el balance de pagos, la inflación se reduce a un buen ritmo, la rentabilidad real de inversiones es bastante atractiva y hay perspectivas de que el crecimiento se acelere este año.
Cabe destacar que las previsiones de Goldman Sachs tienen una especial significación este año, puesto que de facto, la entidad bancaria estará dirigiendo toda la política económica de EEUU, pues Donald Trump, traicionando sus promesas electorales, ha situado a 4 miembros de Goldman Sachs en puestos clave económicos de su administración, (entre los que destaca el presidente de Goldman Sachs, Gary Cohn, que dirigirá la política económica del gobierno norteamericano desde el Consejo Económico Nacional de EEUU).
Y todo lo que diga Goldman Sachs sobre los BRICS es especialmente significativo…porque de hecho, fue Goldman Sachs quien impulsó la creación de los BRICS, de la misma forma que es Goldman Sachs quien pretende hacer caer el dólar como moneda de reserva para crear ese maravilloso “mundo multipolar” que algunos nos están vendiendo como “la resistencia” y que no es más que el Nuevo Orden Mundial largamente planeado por las entidades elitistas.
Durante años, se nos han estado vendiendo a los BRICS, capitaneados por Putin, como una suerte de “resistencia a los planes globalistas”, cuando de hecho, son una creación de Goldman Sachs, la entidad que, de forma cada vez más clara, está al frente en estos momentos, del diseño de las bases del Nuevo Orden.
De hecho, y aunque a mucha gente pueda parecerle disparatado o paradójico, la “resistencia” no son los BRICS, sino las facciones norteamericanas que defienden el unipolarismo y el imperialismo yanqui de la vieja escuela.
El Nuevo Orden Mundial solo puede ser multipolar, porque una globalización donde las multinacionales ejerzan el poder de facto en todo el planeta, no puede tener el poder principal centralizado en el gobierno de una sola nación. Los poderes neo-feudales, no pueden lidiar con el poder absoluto de un Rey que en cualquier momento pueda limitar sus planes.
La función que ejerció EEUU para los planes elitistas ha terminado y ahora EEUU ha de abandonar su posición predominante de carácter imperial y centralizado, para dar paso al nuevo modelo multipolar.
Y los planes siguen su curso, a pesar de la resistencia enconada del establishment norteamericano que intenta mantener los últimos resquicios de poder imperial de su país.
Sobre la creación de los BRICS por parte de Goldman Sachs, hay una pieza de LarouchePac que es bastante reveladora.
Aquí van algunos extractos…
Consideren el caso del BRIC, el acrónimo para las naciones de Brasil, Rusia, India y China, que fue acuñado en noviembre de 2001 por el jefe de Investigación Económica Global de Goldman Sachs, Jim O’Neill. Goldman Sachs no solo creó el término BRIC, sino que también alentó el establecimiento efectivo de esa agrupación diplomática como tal, y luego a principios de 2008 lo despertó de su estado de letargo y lo desplegó activamente.
Goldman Sachs pregona con orgullo su paternidad del BRIC. En su portal electrónico hay una lengüeta absurdamente identificada como “Ideas”, bajo la cual el primer tema se denomina “BRICs”. Ahí se encuentran unos 20 títulos con extensos informes de Goldman Sachs y videos sobre el BRIC, incluyendo un par de entrevistas en video con Jim O’Neill, quien hace gala de su acento inglés; ambos comienzan así: “Hola, este es Jim O’Neill. Soy jefe de Investigación Económica Global de Goldman Sachs, y yo soy el creador del acrónimo ‘BRIC’ “. O’Neill es de Manchester, Inglaterra, y se unió a Goldman Sachs en 1995 luego de varios empleos en Bank of America, Marine Midland, y Swiss Bank Corporation.
Lo que aparece con toda nitidez es que todo el concepto y organización del BRIC como agrupación, salió de Goldman Sachs y de O’Neill, así como su orientación programática, tal como la discusión del establecimiento de monedas regionales y la substitución del dólar con una nueva moneda internacional de reserva. El origen de sus planes más a fondo se remonta a 1971, cuando los Rothschild del imperio británico crearon el Grupo Inter-Alpha, mediante el cual opera el desaforadamente “lucrativo” acarreo de fondos brasilero, el cual constituye actualmente la carnada del anzuelo BRIC.
También queremos destacar la siguiente frase que encontramos al inicio del artículo de Bloomberg sobre la información que les ofrecíamos al principio…
“Goldman Sachs Group Inc., sede del equipo que concibió el marco BRICS para invertir en los mercados emergentes más grandes, está instando a los inversores a “mantenerse al día” con apuestas sobre las monedas de Brasil, Rusia e India, junto con Sudáfrica”.
De hecho, la primera reunión de los BRIC (aún sin Sudáfrica) se produjo en 2006 en Nueva York (donde también está la sede central de Goldman Sachs, su impulsor inicial).
¿Cuántos de ustedes se creyeron esa tontería de que los BRICS eran algo así como “una resistencia al Nuevo Orden Mundial”?
Y sobretodo, ¿cuántos de ustedes se han creído que Putin es una resistencia a ese Nuevo Orden Mundial?
Si ustedes leen entre líneas, verán los auténticos vínculos entre los grupos de poder, reflejados en algo tan evidente como los medios de propaganda a su servicio, cuya función es introducir ideas en el imaginario público.
Centrémonos en este caso, en los medios de propaganda del Kremlin, y más concretamente RT.
Si ustedes son seguidores habituales de RT, habrán ido notando las sucesivas inclinaciones propagandísticas de este medio, según la necesidad de venderle a sus seguidores las ideas que sean convenientes a cada momento.
Un ejemplo de estos giros propagandísticos destacados, lo encontramos, por ejemplo, en el tratamiento de RT sobre la figura del presidente turco Recep Tayyip Erdogan, que ha pasado de ser tratado como poco más que el diablo y un psicópata cuando estaba a las órdenes de la OTAN, a ser “el presidente de un país azotado por el terrorismo”, ahora que es aliado de Rusia y empieza a dar pasos para alejarse de la influencia norteamericana. Y dentro de poco, no lo duden, en RT lo verán siendo tratado como una “bendición para el mundo”, y un símbolo de“resistencia” ante los planes imperialistas de EEUU. Este criminal, acabará siendo casi un santo para RT y otros medios afines.
¿O acaso los medios occidentales no nos venden a los aliados criminales de EEUU de la misma manera? Pues Rusia hace lo mismo, ni más ni menos…
Pues bien, siguiendo con su labor propagandística, RT últimamente nos ofrece una cara amable y conciliadora de uno de los globalistas y elitistas criminales más repugnantes del siglo XX: Henry Kissinger.
Las noticias que nos lo presentan como “un referente” se suceden periódicamente en el canal ruso en los últimos meses, especialmente cuando Kissinger avala a Trump o se brinda a establecer puentes entre Rusia y EEUU, con él como mediador (recordemos que es amigo y consejero personal tanto de Trump como de Putin).
Pero en RT también nos está llamando la atención cómo nos presentan“de forma amablemente neutra”, todas las previsiones económicas de Goldman Sachs, olvidando convenientemente que es una de las entidades financieras más oscuras y corruptas del planeta y que es el símbolo del gobierno de las élites financeras a escala mundial.
La noticia con la que encabezábamos este artículo, es un buen ejemplo de ello, pero ha habido otras.
Pero no solo eso.
RT, desde hace unas semanas, también nos viene ofreciendo periódicamente informes procedentes del Consejo de Relaciones Exteriores o CFR, una de las entidades globalistas más destacadas y que fue impulsada especialmente por “gente maravillosa” como David Rockefeller, o el propio Henry Kissinger.
Pues bien, RT nos presenta el CFR bajo el neutro apelativo de “una organización estadounidense especializada en política exterior”, a la vez que nos va presentando sus informes, cada vez más críticos con las decisiones de Barack Obama.
Solo hace falta juntar todas las piezas del puzzle: Goldman Sachs, los BRICS, Putin y Trump, los nombramientos de 4 tipos de Goldman Sachs en los puestos más determinantes de la administración Trump a nivel económico, Kissinger y su defensa pública de Trump y el tratamiento que de todo ello hace RT…y tendrán un buen retrato de la situación.
Los países BRICS forman parte integral del proyecto de Nuevo Orden Mundial, dirigido desde entidades como Goldman Sachs, la misma entidad que ahora gobierna EEUU a través de su títere Donald Trump.
Cuando se ve que Goldman Sachs está por encima de la presunta lucha titánica entre los “malvados” defensores de la “globalización unipolar” y los benefactores mundiales de la maravillosa“globalización multipolar”, se acaba de una vez por todas la tontería de creer que unos son los buenos que se oponen a las élites financieras malvadas y los otros son sus malignos esbirros.
Todos obedecen a los mismos amos, que benefician o apartan de un plumazo a las diferentes facciones enfrentadas (como ha sucedido con Hillary Clinton), según sea necesario para sus planes, a cada momento.
Pero la cuestión final, es que el proyecto de esas élites marcha a toda máquina hacia su objetivo.
Todo lo que vemos, incluídos los increíbles trasvases de poder e influencia de los últimos meses, o el “ascenso por sorpresa” de presuntos líderes alternativos como Trump, son su proyecto materializándose.
Y la consecución de dicho proyecto, incluye una amplia campaña global de desinformación, destinada a convencer a las masas de que están viviendo algo parecido a una revolución contra los designios del “establishment”.
El objetivo es hacer creer a las masas que el derrumbe del viejo sistema global y el levantamiento del Nuevo Orden Mundial, es un triunfo popular e incluso una revolución.
Nos venderán las nuevas cadenas como si fueran conquistas populares y a los nuevos tiranos, como si fueran libertadores.
Y el problema es que hay gran cantidad de gente predispuesta a creerse sus mentiras, porque prefieren aferrarse a la ilusión de una “falsa victoria sobre los malos”, que a la cruda realidad de que la lucha por nuestra libertad está lejos de terminar y será larga, cruenta y dolorosa.
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