EL HITO HISTÓRICO DEL QUE NADIE HA HABLADO
El hecho es que, por primera vez en la historia, un dispositivo de inteligencia artificial pilotando un avión de combate, ha sido capaz de vencer a un piloto experimentado de las Fuerzas Aéreas de EEUU.
Se trata del programa ALPHA, desarrollado por la empresa Psibernetix.
Dicho programa de inteligencia artificial, logró vencer a un piloto experimentado de EEUU en una simulación de combate aéreo. En cada ‘salida’ virtual, el piloto humano resultó derrotado por el algoritmo, informa UC Magazine.
Fue puesto a prueba por Gene Lee, coronel retirado de las FFAA estadounidenses e instructor de miles de pilotos de combate.
Gene Lee
En cada uno de los combates virtuales, el piloto humano fue derribado por el programa.
En palabras del coronel, “se trata de la inteligencia artificial de combate aéreo más agresiva, adaptativa, dinámica y increíble de todas las que jamás ha visto”.
A lo largo de su desarrollo, ALPHA superó constantemente a los ‘softwares’ anteriormente utilizados para entrenar a pilotos de combate. Tras derrotar al coronel Lee, sin que el piloto humano consiguiera ni una sola victoria, el algoritmo fue probado por otros expertos en combate aéreo.
Como cima de su proeza, el programa ALPHA logró derrotar a tres pilotos humanos a la vez.
Antes de que se produjera este hecho histórico, un piloto experimentado podía perder ante un programa informático, solo si experimentaba con tácticas nuevas, dado que la inteligencia artificial era incapaz de actuar eficazmente en un combate rápido.
Pero ALPHA es capaz de someter a una presión enorme a un piloto humano y derrotarlo por más experimentado que sea.
La eficacia de la inteligencia artificial radica en su capacidad para procesar enormes volúmenes de datos en un corto espacio de tiempo.
ALPHA es capaz de recopilar todos los datos provenientes de diferentes sensores y organizarlos para elegir la mejor acción siguiente unas 250 veces más rápidamente que cualquier humano.
Expertos en estudios aeroespaciales, han comparado la histórica victoria del programa de inteligencia artificial ALPHA sobre los pilotos militares, con el histórico triunfo de la computadora Deep Blue de IBM sobre Kaspárov en una partida de ajedrez.
Estamos pues, ante un hito histórico que ha sido ignorado por los medios de comunicación y que sin embargo, marca un antes y un después en la historia de la humanidad.
Por primera vez, un piloto de inteligencia artificial ha derrotado a los humanos más experimentados en combate, aunque sea en un simulador.
Esto indica que pasada esta barrera, que hasta ahora parecía propia de la ciencia ficción, la ventaja de la máquina sobre el hombre ya no parará de crecer.
A ello debemos añadir que estamos en plena fase de desarrollo de aviones y otros artefactos de combate autopilotados, dotados de inteligencia artificial y capaces de pensar y actuar por sí mismos, como demuestran los avanzados proyectos aeronáuticos rusos, de los que hemos oído hablar estas últimas semanas.
LAS INCREÍBLES CAPACIDADES DE LOS FUTUROS CAZAS RUSOS
Según los medios, los cazas rusos de sexta generación, cuyo primer prototipo estará listo en el año 2025, actuarán contra el enemigo en bandadas de entre 5 y 10 aparatos, la mayoría de ellos no tripulados, y que actuarán de forma independiente controlados por inteligencia artificial.
Estos aviones, fabricados por la aeronáutica Sukhoi, volarán a velocidades hipersónicas y serán incluso capaces de salir al espacio.
Según anunció Vladímir Mijéev, director general adjunto del consorcio Tecnologías Radioelectrónicas KRET, perteneciente a la corporación estatal y fabricante militar rusa Rostec, estas bandadas de aviones solo dispondrán de uno o dos cazas pilotados por seres humanos.
El avión pilotado guiará a una patrulla de entre cinco y diez aparatos no tripulados.
A estos drones hipersónicos se les asignarán tareas como, por ejemplo, atacar objetivos terrestres, destruir aviones enemigos o llevar a cabo misiones de reconocimiento. Los aparatos no pilotados protegerán a los pilotados y las distintas ‘manadas’ podrán intercambiarse aviones en caso de emergencia.
Lo más sorprendente es que los aviones pilotados de sexta generación tendrán características limitadas en comparación con la versión no tripulada, debido a que los cuerpos de los pilotos humanos no podrían soportar físicamente las maniobras extremas a altas velocidades que realizarán estos aviones.
Además, al alcanzar las altas cotas y salir al espacio, los rayos X del espacio cercano resultarían dañinos para los cuerpos de los pilotos.
También se ha avanzado que estos aviones no tripulados, estarán dotados de armamento electromagnético avanzado.
Dichos cañones electromagnéticos, serán capaces de desactivar los dispositivos electrónicos enemigos.
Asimismo, dichas armas solo podrán ser implementadas en los aviones no tripulados, puesto que los poderosos impulsos electromagnéticos generados por el arma, son tan potentes que no se podría proteger a los pilotos.
A todo ello debemos sumar que según los estudios previos, los aviones no tripulados resultarán más baratos que sus pares tripulados por pilotos humanos, lo que indica que a la larga, las aviaciones estarán formadas íntegramente por aviones robot dotados de inteligencia artificial.
Asimismo, Rusia también ha anunciado el desarrollo de un bombardero hipersónico, capaz de realizar ataques nucleares desde el espacio.
El aparato no tripulado, despegará desde pistas convencionales, patrullará el espacio aéreo y, al recibir un orden, saldrá al espacio para lanzar ataques, incluso con armas nucleares, para luego regresar a su base.
Esta iniciativa a la que se ha referido el teniente coronel Alexéi Solodóvnikov podría ser el proyecto clasificado que la prensa occidental ha denominado Yu-71, que Rusia ha comenzado con el objetivo de desarrollar una aeronave hipersónica.
De acuerdo con las especulaciones de la prensa, como fue el caso de un artículo de The Washington Times publicado en 2015, ese aparato forma parte del proyecto clasificado número 4202. A pesar del secretismo imperante, varios especialistas han especulado con la opción de que alcance unas velocidades próximas a 3.130 metros por segundo, casi 10 veces el número Mach.
Basándonos en los datos que nos ofrecen y conociendo que ya se ha superado este hito histórico, todo indica que, aunque ahora parezca ciencia ficción, en 10 años viviremos en un mundo donde aviones robot de combate, dotados de capacidad de ataque nuclear, serán capaces de controlar el planeta desde el espacio, sin intervención humana y sin que ningún ser humano pueda hacerles frente con ninguna de las armas disponibles, puesto que ahora, ya son capaces de vencer a un humano en combate.
Lo que estamos viviendo pues, es una auténtica locura.
Parece como si alguien estuviera empeñado en conseguir que las fantasías más oscuras, como las de las películas de Terminator, se acaben haciendo realidad.
No solo la inteligencia artificial ya ha demostrado ser capaz de derrotar a pilotos humanos en combate, sino que encima, los aviones controlados por estas inteligencias artificiales, tal y como nos demuestran los proyectos rusos, tendrán capacidades técnicas muy superiores a las que tendrán los artefactos controlados por humanos.
¿Vamos a permitir que se creen artefactos con un poder de destrucción inimaginable, controlados por inteligencia artificial y a los cuales, los humanos no podrán hacerles frente?
¿Qué tipo de dementes están al frente de estos proyectos?
Fuentes:
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