En anteriores artículos indicamos que esta provocación turca iba a provocar un torrente de información, suministrado por Rusia y sus aliados, sobre las estrechas relaciones entre Estado Islámico y el gobierno turco.
Y ya estamos empezando a verlo…empiezan a surgir (o a resurgir) con cada vez más fuerza, las informaciones sobre la relación de Erdogan y su propia familia con los terroristas de Estado Islámico.
LOS PELIGROSOS JUEGOS DE ERDOGAN CON ISIS
Cada vez salen a la luz más y más detalles que revelan que Estado Islámico o Daesh, está siendo alimentado y mantenido vivo por Recep Tayyip Erdogan, el presidente turco, y por el servicio de inteligencia turca, el MIT.
Ese demente de Erdogan, en su búsqueda enloquecida de la fantasía de un nuevo imperio otomano que se extienda hacia Siria e Irak, amenaza no sólo con destruir a la propia Turquía, sino a gran parte de Oriente Medio si continúa con sus actuales maniobras.
En octubre de 2014 el vicepresidente estadounidense, Joe Biden, dijo en una reunión en Harvard que el régimen de Erdogan estaba respaldando a ISIS con “cientos de millones de dólares y miles de toneladas de armas”. Biden se disculpó más tarde por haber cometido tal desliz.
Los militantes de ISIS fueron entrenados por los Estados Unidos, Israel y ahora se sabe también que por las fuerzas especiales turcas, en bases secretas en la provincia de Konya, en la frontera turca con Siria, durante los últimos tres años.
Sin embargo, la implicación de Erdogan con ISIS es aún más profunda.
ISIS, UN NEGOCIO FAMILIAR
La fuente principal de dinero que alimenta a ISIS actualmente, es la venta del petróleo iraquí procedente de los campos petrolíferos de la región de Mosul, donde ISIS está fuertemente asentado. El propio hijo de Erdogan es el hombre que hace que las ventas de exportación de ese petróleo robado por ISIS se posible.
Bilal Erdogan posee varias compañías marítimas. Al parecer, ha firmado contratos con empresas operadoras europeas para llevar petróleo robado iraquí a diferentes países asiáticos. El gobierno turco compra petróleo iraquí saqueado, que está siendo producido a partir de los pozos de petróleo iraquíes incautados por los terroristas.
Bilal Erdogan
Las compañías marítimas de Bilal Erdogan poseen muelles especiales en los puertos de Beirut y Ceyhan que transportan el petróleo de contrabando en petroleros con destino a Japón.
Necmettin Bilal Erdogan, conocido comúnmente como Bilal Erdogan (nacido el 23 de abril de 1980) es el tercer hijo de Recep Tayyip Erdogan, actual Presidente de Turquía.
Después de graduarse en la Kartal Imam Hatip High School en 1999, Bilal Erdogan se trasladó a los EEUU para la educación de pregrado. También obtuvo un Master en la Escuela John F. Kennedy de la Universidad de Harvard en 2004. Después de graduarse, trabajó en el Banco Mundial como pasante durante un tiempo. Regresó a Turquía en 2006 y comenzó su vida en el mundo de los negocios. Bilal Erdogan es uno de los tres accionistas principales de “BMZ Group Denizcilik”, una empresa de transporte marítimo.
Gürsel Tekin vicepresidente del Partido Popular Republicano turco, CHP, declaró en una reciente entrevista con los medios de Turquía: “el presidente Erdogan afirma que de acuerdo con los convenios internacionales de transporte, no hay ninguna infracción legal en relación con las actividades ilícitas de su hijo Bilal, y afirma que éste está realizando negocios ordinarios con las empresas japonesas, pero en realidad Bilal Erdogan está implicado hasta el cuello en complicidad con el terrorismo, pero mientras su padre esté en el cargo, será inmune a cualquier proceso judicial”.
Tekin añade que la compañía marítima de Bilal que realiza el servicio de exportación del petróleo de ISIS, BMZ Ltd, es “una empresa familiar, en la que parientes cercanos de Erdogan tienen acciones y en la que hacen mal uso de fondos públicos y consiguen préstamos ilícitos de los bancos turcos”
Además de la comercialización del petróleo robado de ISIS realizada por Bilal Erdogan, Sümeyye Erdogan, la hija del presidente turco, también dirige un hospital secreto dentro de Turquía cercano a la frontera Siria, al que diariamente los camiones del ejército turco transportan decenas de heridos yihadistas de ISIS para que reciban las pertinentes curas y puedan ser enviados de vuelta a librar la sangrienta Jihad en Siria.
Sümeyye Erdogan
Esta información se sabe gracias al testimonio de una enfermera que fue reclutada para trabajar allí hasta que se descubrió que era un miembro de la rama alauita del Islam, al igual que el presidente sirio, Bashar al-Assad, al que Erdogan parece empeñado en derrocar.
El ciudadano turco Ramazan Bagol, capturado por las Unidades de Defensa Popular kurdas, YPG, cuando intentaba unirse a ISIS de la provincia de Konya, dijo a sus captores que fue enviado a ISIS por la ‘Secta Ismailia’ turca, una estricta secta turca del Islam a la que está vinculado el presidente Erdogan y toda su familia. Bagol dijo que la secta recluta a los miembros y proporciona apoyo logístico a la organización islamista radical. Agregó que la Secta da entrenamiento a los jihadistas en las cercanías de Konya y los envía a Siria posteriormente para que se unan a las filas de ISIS.
Según el analista geopolítico francés, Thierry Meyssan, Recep Tayyip Erdogan “organizó el saqueo de Siria, desmanteló todas las fábricas en Alepo, la capital económica, y robó las máquinas. Del mismo modo, organizó el robo de tesoros arqueológicos y estableció un mercado internacional en Antioquía … con la ayuda del general Benoît Puga, Jefe de Estado Mayor Francés, organizó una operación de bandera falsa destinada a provocar el lanzamiento de una guerra de la OTAN, cuando realizaron el bombardeo químico en Damasco, en agosto de 2013”
Meyssan afirma que la estrategia en Siria de Erdogan, fue inicialmente desarrollada en secreto en coordinación con el ex ministro de Relaciones Exteriores francés, Alain Juppé y con el entonces ministro de Relaciones Exteriores de Erdogan, Ahmet Davutoglu en 2011, después de que Juppé convenciera a un reticente Erdogan para que apoyara el ataque a Siria, a cambio de la promesa de un apoyo francés a la adhesión de Turquía a la UE. Francia más tarde se retiró, dejando que Erdogan continuara con el baño de sangre en Siria, usando mayormente a ISIS como instrumento.
Alain Juppé y Racep Tayyip Erdogan
A la vista de todas estas informaciones y de muchas más que afectarán gravemente a Erdogan y a toda su familia y que irán apareciendo en breve, no sabemos cuál puede ser el futuro de Erdogan, recientemente elegido presidente, al frente de Turquía.
Está claro que a los países occidentales no les interesa que salgan a la luz los chanchullos de esta familia de criminales, pues todos los países occidentales están implicados en ello en mayor o menor medida.
Es previsible que se intentará rebajar la tensión lo más rápidamente posible, para intentar tapar el asunto con la mayor brevedad y que la población no conozca la directa implicación con el terrorismo (contra el que dicen luchar), de muchos de nuestros gobiernos…
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